Las fuertes precipitaciones que azotan a la región dejaron numerosos lugares del distrito bajo agua. En 24 horas llovió casi el triple de lo esperado para el mes.

Las fuertes precipitaciones que azotan a la región dejaron numerosos lugares del distrito bajo agua. En 24 horas llovió casi el triple de lo esperado para el mes.
Los barrios San Jacinto, Amad, Cabot y Bedoya fueron algunos de los afectados. El agua inundó las calles y entró a muchos hogares.
La asistencia está compuesta por alimentos no perecederos, agua potable, artículos de limpieza e higiene, colchones y ropa.
Los polideportivos municipales y los cuarteles de bomberos están funcionando como centros de recolección de alimentos, ropa y productos de primera necesidad.
En las últimas 96 horas cayeron más de 187 milímetros de agua. Hubo anegamientos en muchos lugares y familias evacuadas.
Las furiosas precipitaciones de la mañana del viernes superaron los 60 milímetros en 90 minutos. Sin embargo, no hubo daños graves.
La entidad recibe alimentos no perecederos, agua potable, ropa, calzados, colchones, sábanas, frazadas y artículos de limpieza e higiene personal.
La cantidad de agua caída en las últimas horas, sumado a las fuertes ráfagas de viento, provocaron severos daños materiales y múltiples perjuicios.
La empresa se comprometió a incrementar la cantidad de cuadrillas para atender los reclamos. A más de 72 horas del temporal, decenas de barrios siguen sin electricidad.
Son más de 7 mil usuarios, según el sitio web del ENRE. Desde el Municipio afirman que hay más de cien barrios afectados.
Los fuertes vientos provocaron la caída de árboles, postes y cables de energía eléctrica. También volaron techos y carteles. Se reportaron más de 350 incidentes.