Malestar en Maschwitz: Una serie de robos violentos pone en alerta a los vecinos

Más de un centenar de personas se movilizaron a la comisaría para reclamar seguridad. La convocatoria surgió a partir del caso en el que un ladrón apuñaló a un joven para robarle su celular en el polideportivo municipal.

Hartazgo. Cansados de la inseguridad, los vecinos de Maschwitz decidieron salir a la calle.

Más de un centenar de personas se movilizaron a la comisaría para reclamar seguridad. La convocatoria surgió a partir del caso en el que un ladrón apuñaló a un joven para robarle su celular en el polideportivo municipal.

Pacíficamente pero con mucha bronca acumulada, más de un centenar de vecinos se movilizó este viernes a la noche hasta la comisaría de Ingeniero Maschwitz en reclamo de mayor seguridad, a partir de una serie de robos violentos que empezaron a generar inquietud y malestar en la comunidad.

El disparador de la manifestación fue el caso de un joven de 18 años que fue apuñalado por un delincuente que le robó el celular. El hecho ocurrió el pasado jueves 14 en el polideportivo de Maschwitz, alrededor de las 23, y el presunto atacante, de 20 años, ya fue detenido.

La víctima se llama Axel Manes y es alumno de la Escuela Media Nº4 de la localidad. Estaba junto a un amigo retirando una bicicleta del sistema público cuando fue abordado por dos individuos. «Querían robarle el celular, que tenía en la mano para poder desbloquear el uso de la bicicleta. Y uno de ellos lo apuñala. La idea fue matarlo, sin más», denunció su padre, Guillermo.

El joven luchó con sus agresores. Por eso, uno de ellos sacó una especie de faca y lo cortó por todos lados. Uno de los cortes le provocó una herida bastante profunda entre la nalga y el muslo de la pierna derecha.

Víctima. Axel Manes fue acuchillado por un ladrón que lo atacó en el polideportivo de Maschwitz.

«Mi hijo relató que uno de los ladrones, que cayó al piso, fue quien le pidió a su cómplice ‘matalo, matalo’. A mi hijo lo tuvo que ver un cirujano y le tuvieron que dar ocho puntos externos y otros internos. Si no fuera por un matrimonio que le hizo un torniquete y lo subió a su auto para llevarlo al hospital, no sé qué hubiera pasado”, expresó el hombre.

«Las cámaras de seguridad donde mi hijo fue atacado no funcionan, tampoco había iluminación y las pocas que hay están tapadas por las ramas de los árboles. Las bicicletas fueron una gran idea, pero que se convirtieron en trampas mortales por su ubicación. Pedimos que cuiden a nuestros hijos y que haya más seguridad», reclamó Manes, quien tiene una peluquería y salón de belleza en la localidad.

A partir de este episodio, y a pesar de que el autor fue detenido y el celular recuperado, familiares y allegados del joven impulsaron desde las redes sociales una manifestación para reclamar seguridad en la comisaría Escobar 2da.

La convocatoria reunió a un centenar de vecinos, varios de los cuales tomaron el micrófono para relatar sus traumáticas experiencias y finalmente fueron recibidos por el jefe policial de la localidad.

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