Ileso de milagro: Motociclista evitó ser aplastado por la carga de un camión

El joven conductor saltó a tiempo de su moto antes de que se le caiga encima un elevador hidráulico, en El Curvón de Garín. Testigos del hecho afirman que el camionero realizó una maniobra imprudente.

Pudo ser una tragedia. La pesada estructura del elevador se desplomó sobre la moto del joven.

El joven conductor saltó a tiempo de su moto antes de que se le caiga encima un elevador hidráulico, en El Curvón de Garín. Testigos del hecho afirman que el camionero realizó una maniobra imprudente.

Por esas cosas del destino, un motociclista que se disponía a cruzar la siempre peligrosa intersección del puente El Curvón, en el límite de Garín con la vecina localidad de Benavídez, salvó su vida de milagro este martes a la tarde al evitar que el vuelco de un camión lo aplastara.

El cinematográfico suceso ocurrió alrededor de las 16, cuando un joven conductor estaba esperando para girar hacia la Colectora Oeste y se vio sorprendido por la carga de un camión que se estaba desplomando a su lado e, indefectiblemente, iba a caer encima de su cuerpo.

Su concentración y agilidad le salvaron literalmente la vida, ya que en un santiamén saltó de su moto Yamaha FZ-16 y evitó ser aplastado por una enorme cantidad de materiales pesados, ya que se trataba de un elevador hidráulico que estaba dividido en partes y era trasladado a un taller mecánico, según trascendió. Quien no corrió la misma suerte fue su moto, que quedó bajo los hierros.

Algunos testigos señalaron que el camionero habría tenido la culpa del vuelco por doblar a gran velocidad mientras cruzaba el puente, en dirección a Benavídez. El conductor salió ileso al igual que el motociclista, quien se llevó, como suele decirse, el susto de su vida.

Por tratarse simplemente de un incidente -no hubo daños-, no intervinieron en el lugar del hecho los bomberos voluntarios ni la policía de Garín. Sí lo hicieron agentes de Defensa Civil y de Tránsito del Municipio, los cuales debieron interrumpir la circulación vehicular hasta que la carga sea retirada de la calzada.

En fin, una desgracia con suerte, mucha suerte, en un cruce vehicular neurálgico que suele causar muchos dolores de cabeza. Quizás, un semáforo en El Curvón no vendría nada mal.

Por Damián Fernández

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