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El presupuesto se destinó a poner en valor la terapia intensiva, el quirófano, pediatría y el ingreso principal. Además, el establecimiento incorporó equipamiento y mobiliario.
El gobierno de la provincia de Buenos Aires invirtió 31 millones de pesos en las obras de remodelación realizadas recientemente en el hospital Enrique Erill, donde se llevó a cabo la puesta en valor de la unidad de terapia intensiva, el quirófano central, el servicio de pediatría y el ingreso principal.
La obra en la unidad de terapia intensiva demandó una inversión de 12 millones de pesos y logró aumentar su capacidad operativa: pasó de 6 a 12 camas de alta complejidad, con nuevo equipamiento de última generación.
Además, con fondos del programa Sumar se adquirieron e instalaron siete camas eléctricas. A la vez, se renovaron los paneles de gases medicinales.
Desde el Ministerio de Salud también señalaron que, durante la pandemia de Covid-19, a esta unidad se incorporaron respiradores, bombas de infusión y monitores multiparamétricos.
Más plazas. La unidad de terapia intensiva duplicó la cantidad de camas que tenía en 2020.
El quirófano central, por su parte, recibió una inversión de cuatro millones de pesos: veintiocho camas con oxígeno central para adultos, dos nuevas camas de recuperación, una sala para materiales usados y la red de aire comprimido para tres quirófanos.
Además, se dotó con una torre de endoscopia, gastroscopio y colonoscopio, que se agregan a la nueva mesa de anestesia instalada. También finalizaron trabajos de pintura y se colocaron nuevas aberturas.
Asimismo, en el servicio de pediatría se construyeron nuevos baños, cielorraso y se creó una juegoteca, que permite un espacio de recreación para niños, como también un área de trabajo para equipos de salud que, mediante el juego, evalúan el estado de salud de los pequeños pacientes. Todo esto se realizó con una inversión de cinco millones de pesos.
Puesta en valor. Los cinco pisos del hospital fueron pintados e iluminados a nuevo.
En tanto, el ingreso del hospital también fue remodelado con una inversión de $10 millones, que incluyó nueva iluminación y veredas, tareas de pintura, colocación de cestos de basura y señalización con cartelería.
Dentro del plan de reformas, los espacios de los cinco pisos del hospital se pusieron en valor con trabajos de pintura en los cielorrasos, nueva luminaria y la instalación de tándem de sillas.
“El Estado provincial trabaja para garantizar el derecho a la salud. Uno de los hitos es el crecimiento de nuestros hospitales públicos. Con ampliaciones, refacciones y nuevos espacios dotados con la mejor tecnología, que agilizaron y fortalecieron la atención”, afirmó el ministro de Salud, Nicolás Kreplak, quien el mes pasado visitó el hospital de Escobar y recorrió las obras realizadas.
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