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Por iniciativa de una docente, un grupo de alumnos borró los escritos que embadurnaban las paredes del colegio de monjas. Y van por más.
María Elisa Díaz, la docente mentora de la limpieza.
Es sabido que todo alumno disfruta más del colegio fuera que dentro del aula. Sin entrar en un análisis pedagógico ni de otro tipo sobre este aserto, ello explica que la mayoría del curso haya levantado decididamente su mano para aprobar la propuesta que la profesora realizó en medio de la clase: limpiar la fachada del colegio, atestada de grafitis.
Así, los alumnos que cursan por la mañana el tercer año secundario en el instituto Santa María salieron a la calle con lijas, trapos y aguarrás, sin renegar por la tarea. Por el contrario, se los notaba entretenidos y concentrados, haciendo su aporte con gusto.
La iniciativa surgió en una clase de Construcción de la Ciudadanía (ex Cívica), donde la profesora María Elisa Díaz de Téliz se refería a las normas que regulan al comportamiento en sociedad. “Se me ocurrió dar un ejemplo con las pintadas del colegio y les propuse a los chicos que las limpiáramos. Como la mayoría dijo que sí, acá estamos”, explicó a El Día de Escobar la docente, también conocida por su actividad como presidenta de la asociación amigos de la biblioteca municipal.
Las chicas, de buen ánimo, en plena tarea.
Los estudiantes, junto a la profesora, pusieron manos a la obra este miércoles 23 al mediodía, aprovechando el horario de 12 a 14 en el que estarían en el aula cursando la materia.
“Yo fui uno de los primeros en levantar la mano, porque me pareció una buena idea ayudar en este tipo de cosas”, afirmó Emanuel Aciar, uno de los integrantes del “ejército de lijadores”. “Varias de estas pintadas las hicieron algunos compañeros nuestros que ni siquiera colaboraron para limpiar”, delató una chica, interrogada al respecto. Y Tomás Ghezzi asintió. Eso sí, que los demás se queden tranquilos: no se pidieron ni se dieron nombres.
“Tenemos otras ideas para hacer más grande el proyecto. De hecho, el Banco Provincia le propuso al colegio hacer unos murales en su sucursal de Tapia de Cruz. Así que después de esta vereda pasaremos a la otra”, anunció Díaz, entusiasmada.
Chicas y chicos hacen un alto para la foto. Después siguieron limpiando.
Yo me acuerdo de estos pibes. estaba con los sanwichitos ( o com se escriba) y me gritaron «ADRIIIANNNNNNN»……. Y me paso lo peor, me paso por encima un camion 8 ejes……
trite un dia triste para la vida de adrian……………
waaaaaaaaaaaaaaaaaaatu!!
Impresionantemente, venimos a enterarnos despues de unos 5 meses de esta nota! Lo mas loco es que se dio de casualidad, despues de un arduo domingo preparando EMPANADAS DE DULCE DE LECHE CASERO para el bicentenario. Que colegio màs particular el nuestro eh jaja.
Muy lindo el trabajo, muy bueno todo, làstima que a las dos semanas la fachada se vió atestada de grafitis y otros mamarrachos otra vez. La verdad que estaria bueno que la municipalidad ponga cartas en el asunto… No?
Esperemos que las cosas mejoren.
A COMER EMPANDAS !