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La iniciativa surge ante el elevado índice de accidentes de tránsito, muchos de ellos graves y con víctimas fatales. El distrito es el décimo de la provincia de Buenos Aires con más muertes por esta causa.
Los accidentes de tránsito en el partido de Escobar, desde hace tiempo, son moneda corriente. Algo de todos los días, en cualquier lugar y a cualquier hora. No es una sensación ni una exageración: las estadísticas oficiales lo ubican entre los municipios de la provincia de Buenos Aires con peores índices de seguridad vial.
El último informe público del Sistema Nacional de Información Criminal (SNIC), que depende del Ministerio de Seguridad, corresponde a las estadísticas de 2019. En ese año, el partido de Escobar fue el décimo con más muertes por accidentes de tránsito y el 31º a nivel nacional (ver nota acá).
Una buena parte de los accidentes, generalmente los más graves, suceden sobre la autopista Panamericana, que atraviesa transversalmente al partido de Escobar a lo largo de 22 kilómetros. Pero muchos también ocurren en avenidas, calles céntricas y zonas suburbanas, donde el creciente tránsito interno y las imprudencias provocan cada vez más colisiones.
Las restricciones a la circulación impuestas durante la pandemia tuvieron, como lógica consecuencia, un descenso significativo en el índice de siniestralidad vial. Pero las progresivas aperturas volvieron a incrementar la movilidad y, por añadidura, los accidentes también empezaron a aumentar, al igual que las cifras de heridos y muertos.
Ante esta creciente problemática, en Escobar se creará un Observatorio Municipal de Seguridad Vial como herramienta para estudiar el fenómeno y aportar posibles soluciones. Se trata de un proyecto de ordenanza del Departamento Ejecutivo, que fue aprobado por unanimidad en la última sesión del Concejo Deliberante y promulgado por el intendente Ariel Sujarchuk.
La nueva dependencia estará destinada a “la investigación de hechos y actos vinculados con el uso y la circulación en la vía pública, comprendiendo el estudio de los vehículos, el transporte, las personas, la infraestructura vial y las condiciones del medio ambiente físico y social, a fin de generar información confiable que permita establecer políticas estratégicas en pos de una movilidad segura y sustentable”, según expresa el artículo segundo de la ordenanza.
Sus objetivos están definidos en el artículo tercero y se dividen en tres ejes: “promover el desarrollo de la operatividad en relación al tránsito y al transporte en territorio municipal, en función de una movilidad segura y sustentable”, “reducir la exposición a riesgos y/o daños de los diferentes usuarios en la vía pública” e “impulsar desde todos los ámbitos el debate social sobre las políticas públicas de seguridad vial”.
Sus funciones, en tanto, están sintetizadas en seis aspectos. Los primeros tres son: “la generación de bases de datos e índices relevantes relativos a siniestralidad vial”, “desarrollar trabajos estadísticos y de investigación” y “colaborar en la implementación de las acciones que deriven de las políticas públicas”.
Además, deberá “producir informes de gestión”, “crear y coordinar una mesa de datos intersectorial” para “recolectar e intercambiar información en materia de siniestralidad y planificación vial” y “promover la difusión de toda información estadística y recomendaciones a través de los diversos medios de comunicación”.
Por último, la ordenanza autoriza al Departamento Ejecutivo a firmar convenios de colaboración con entidades públicas o privadas “a los efectos de instrumentar el traslado de la información que estas recaban en materia de seguridad vial y otras acciones a fin de una movilidad segura y sustentable”.
“La idea es trabajar en forma conjunta y colaborativa para tomar acciones concretas que disminuyan los siniestros viales”, expresó a El Día de Escobar la titular de la Agencia Municipal de Tránsito y Seguridad Vial, Verónica Sabena, de quien dependerá el Observatorio, que por ahora no fue conformado.
