En medio de las múltiples actividades oficiales que tuvieron lugar el sábado por el sesenta aniversario de la creación del partido de Escobar, casi pasó inadvertida la inauguración de la remodelación, ampliación y puesta en valor del Palacio Municipal. Una obra de alto valor simbólico, que es a la vez un homenaje y la finalización de una iniciativa que quedó trunco hace décadas.
Recién ahora, tras más de 80 años, el proyecto diseñado por el reconocido arquitecto italiano Francisco Salamone finalmente se concretó. Y la obra fue inaugurada en la noche del sábado, minutos antes del desfile de carrozas de la Fiesta de la Flor, en una sencilla ceremonia que encabezó el intendente Ariel Sujarchuk.
La remodelación del emblemático edificio de Estrada y Asborno se realizó en base a la idea original del profesional oriundo de Sicilia, cuyo desarrollo había quedado a la mitad desde su inauguración hasta la actualidad.
Alrededor de cinco meses de trabajo llevó la obra, que comenzó en mayo (ver nota acá). Primero se construyó el primer piso, de 290 metros cuadrados: Para el final quedó la instalación de una torre de reloj de 18 metros de altura, que le confiere una particular jerarquía y atractivo visual.
También se colocaron ascensores y equipos para climatizar e iluminar las oficinas de la planta superior, donde habrá despachos y nuevas salas de reuniones.
A su vez, la estructura fue modificada de hormigón a metálica, lo que permitió agilizar notoriamente el tiempo de obras.
“Fue una decisión política de entonces dejar la obra inconclusa. Y fue también una decisión política de ahora terminar de construirla y hacerla realidad respetando su diseño original”, afirmó el jefe comunal.
La iniciativa, surgida de un grupo de vecinos, le pone punto de cierre al proyecto de Salamone y deja un edificio acorde a la historia del partido. “Al Escobar que florece en el presente y al que proyectamos hacia el futuro lo hacemos de manera colectiva, soñando juntos, tirando para el mismo lado y comprometiéndonos, más allá de cualquier ideología”, afirmó Sujarchuk.
El acto de inauguración contó con personalidades de distintas fuerzas políticas; entre ellas el secretario general de la Gobernación bonaerense, Fabián Perechodnik; los diputados nacionales Laura Russo de Sujarchuk, Cristrina Avarez Rodríguez y Juan Cabandié; el intendente de Malvinas Argentinas, Leonardo Nardini; el presidente del Concejo Deliberante, Pablo Ramos; el candidato a intendente de Juntos por el Cambio, Leandro Costa, y la Defensora del Pueblo, Rocío Fernández, entre otras.
Un arquitecto emblemático
Francisco Salamone D’Anna (1897-1959) nació en Sicilia, Italia, y llegó a la Argentina en 1900. Estudió en la Universidad Nacional de La Plata (UNLP) y en la Universidad Nacional de Córdoba (UNC). En 1917 se recibió de arquitecto e ingeniero.
A mediados de los años 30, el gobernador bonaerense Manuel Fresco designó a Salamone la tarea de diseñar distintos edificios públicos para estimular el crecimiento de las incipientes localidades del interior de la provincia.
Una de esas obras fue el edificio de la entonces Delegación Municipal de Escobar, que hasta 1959 formó parte del partido de Pilar, del cual sólo se concretó la primera parte. En aquellos años se adujeron razones presupuestarias y falta de dinero para completar la construcción, que ahora se verá finalmente concretada tal como la ideó su prestigioso mentor.