Protesta frente al Palacio Municipal por la construcción de una alcaidía

Decenas de vecinos del barrio Donatelli y alrededores manifestaron su rechazo a la construcción de un establecimiento penitenciario al lado del cementerio de Belén de Escobar. El proyecto ya está en etapa de licitación.

Rechazo. «No queremos una cárcel en nuestro barrio», decían algunas de las pancartas (Foto: Letras de Garín).

Decenas de vecinos del barrio Donatelli y alrededores manifestaron su rechazo a la construcción de un establecimiento penitenciario al lado del cementerio de Belén de Escobar. El proyecto ya está en etapa de licitación.

Decenas de vecinos se convocaron este lunes al mediodía frente al Palacio Municipal para manifestar su rechazo a la construcción de una alcaidía en el barrio Donatelli, al lado del cementerio público de Belén de Escobar. Tres funcionarios del Ejecutivo dialogaron con ellos y se abrió una mesa de diálogo, aunque el proyecto ya está en pleno proceso de licitación.

La movilización, convocada a través de las redes sociales, se originó al conocerse que el gobierno provincial publicó en el Boletín Oficial el llamado a licitación para comenzar la construcción del edificio, tal como El Día de Escobar dio a conocer el pasado 20 de agosto (ver nota acá).

Sin embargo, el proyecto había sido anunciado por el intendente Ariel Sujarchuk en diciembre del año pasado (ver nota acá), el convenio entre el Municipio y el Ministerio de Justicia y Derechos Humanos bonaerense se firmó a fines de diciembre (ver nota acá) y el Concejo Deliberante lo convalidó en la sesión del 4 de junio, en votación unánime y sin debate parlamentario.

Ante el avance del proyecto, días atrás comenzó a circular por Facebook una petición en la plataforma Change para exigir la relocalización de la “cárcel” (sic). La demanda, dirigida a Sujarchuk y al gobernador Axel Kicillof, entre otros funcionarios, ya superó las 5.000 firmas.

“El centro de detención provisoria se construirá en un predio de una hectárea y media, al lado del cementerio municipal. No queremos que se vea perjudicado el valor de nuestras propiedades, ni se altere la tranquilidad y el ambiente de nuestra comunidad. El barrio Donatelli (mal llamado Cementerio) es una comunidad de ciudadanos trabajadores, honrados y humildes como los son los pobladores de los barrios aledaños, barrio Philips y La Chechela ¿Hay alguna razón por la cual se eligen barrios pobres para construir cárceles?”, sostiene el petitorio virtual.

El malestar de los vecinos replica una situación similar a la que ocurrió el año pasado en Ingeniero Maschwitz, donde el Servicio Penitenciario Bonaerense tenía previsto construir un edificio de las mismas características sobre la ruta 26, en el límite con el partido de Tigre (ver nota acá). Ante el rechazo que generó, la iniciativa quedó desechada, a pesar de haber sido aprobada en noviembre por la Legislatura provincial (ver nota acá), en el marco de un proyecto de ley mucho más amplio.

La alcaidía departamental que se prevé construir en Belén de Escobar tendrá capacidad para alojar hasta 300 internos, con lo cual resolverá un problema de antigua data como la superpoblación en los calabozos de las comisarías (ver nota acá). Para los vecinos del barrio Donatelli, en cambio, será un problema nuevo.

Repercusión. Un móvil de TN vino a Escobar para cubrir la protesta de los vecinos (Foto: Letras de Garín).

Afirman que sus viviendas se depreciarán y harán del vecindario un lugar peligroso. También cuestionan no haber sido consultados y el impacto ambiental de la obra, que según ellos será negativo.

Un grupo representativo de los vecinos que se manifestaron frente al Palacio Municipal fue recibido por el secretario de Gobierno, Javier Rehl; la secretaria de Legal y Técnica, Laura Guazzaroni, y el secretario de Seguridad, Nicolás Serruya.

“Les informamos de qué trata el proyecto, que tiene menor envergadura (NdR: que una cárcel) y un destino vinculado a aquellas personas detenidas en el marco de un proceso penal, que aún gozan del beneficio de su inocencia y no han recibido una condena”, explicó Serruya a El Día de Escobar.

“Les contamos a los vecinos que este proyecto nos va a permitir sacar a los internos de las comisarías. Es una política de Estado apoyada por todas las fuerzas políticas locales. La idea es mejorar una problemática estructural que tiene la provincia, que es la superpoblación de las unidades penitenciarias, la falta de alcaidías y cómo se ve eso reflejado en las comisarías”, señaló.

Además, el funcionario sostuvo que “dejar de tener personas detenidas en las comisarías implica sumar una gran cantidad de recursos humanos que hoy están destinados a tareas de cuidado y traslado de esas personas”.

“En su peor momento, la Comisaría 1ra de Escobar llegó a tener 50 detenidos en un lugar que no tiene condiciones para albergar a más de 6 personas. Hay muchísimo más riesgo de fuga en una comisaría, como nos pasó en Garín hace poco tiempo, porque alojamos detenidos allí cuando no están dadas las condiciones o, al menos, no en esa magnitud”, ejemplificó en respuesta al temor de los vecinos por la presunta peligrosidad que implicaría este establecimiento para el entorno.

Los vecinos tienen pensado entregar un petitorio a las autoridades con sus inquietudes sobre la construcción del edificio penitenciario. “Se abrió una mesa de diálogo, pudimos aclarar algunas cosas y vamos a darle una respuesta a los planteos que nos formulen para buscar la mejor solución”, aseguró el secretario de Seguridad del Municipio.

Por Alejo Porjolovsky

Dejá tu comentario

Seguí leyendo