Una espeluznante historia ocurrió esta semana en el barrio Lambertuchi: una joven de 23 años abandonó el martes a la beba que acababa de parir en su domicilio y la dejó morir a la intemperie en un descampado próximo a la ruta 25, donde este viernes fue detenida por efectivos policiales cuando se aprestaba a cambiar de lugar el pequeño cadáver.
Las autoridades se enteraron del caso el miércoles a la mañana a partir de la denuncia que un hombre presentó contra su prima, con quien compartía una vivienda en la calle Los Jazmines al 2400, en ese populoso barrio de Belén de Escobar. Ella se había afincado allí hace algunos meses tras arribar de Misiones, de donde es oriunda.
La joven es madre de dos nenes de 5 y 2 años y estaba embarazada producto de una relación con un remisero de 64 años con domicilio en Pilar, según declaró su primo. Además, reveló que su prima contrató a una enfermera y que el martes dio a luz en su dormitorio.
Pero la mujer no quería ser madre de la criatura que había gestado en su vientre a lo largo de nueve meses. Y decidió que el alumbramiento fuera en su casa, por fuera del circuito sanitario formal, para poder deshacerse cuanto antes de la criatura, a la que dejó a la buena de Dios en un descampado cercano.
Aparentemente, la intención de la joven era darse a la fuga con sus otros dos hijos, pero antes se encontró con quien sería el padre de la recién nacida y le confesó el aberrante hecho.
Además, le dijo que el cuerpo lo había enterrado en la casa de la asistente sanitaria y que durante el transcurso del día le indicaría el lugar exacto. Pero había mentido.
Tras una investigación que personal de la comisaría Escobar 1ra desarrolló con colaboración de algunos familiares de la mujer, este viernes la Policía pudo encontrar el cuerpo sin vida de la beba y, al mismo tiempo, atrapar in fraganti a la joven de 23 años mientras se disponía a cambiarlo de lugar.
Resulta que esta mañana la joven se iba a presentar en la Fiscalía para confesar su delito, pero minutos antes de hacerlo se arrepintió y le solicitó a su hermana que la acompañe a “descartarse del cuerpo del bebé”, según informaron fuentes del caso a El Día de Escobar.
Es así que los pesquisas se dirigieron a la dirección revelada por la familiar convertida en informante.
El lugar era un descampado con abundante vegetación, ubicado sobre la calle La Pampa, entre ruta 25 y Las Magnolias, distante unos trescientos metros del domicilio de la mujer. Allí había tirado envuelta en una manta a su niña recién nacida. Y hasta ahí se acercó 72 horas después para trasladarla unos cien metros y dejarla sobre la calle, al costado de un zanjón.
En ese preciso instante, la mujer fue aprehendida por los efectivos policiales y se encontró el cuerpo de la bebé, que ya se encontraba en estado de descomposición y pesaba cuatro kilos, según los peritos.
Asimismo, se halló una bolsa de nylon con restos de placenta dentro de una zanja ubicada a cien metros.
La mujer ya se encuentra detenida a disposición de la Justicia y fue imputada por el delito de “abandono de persona seguido de muerte, agravado por el vínculo”, que estipula una pena de cinco a quince años de reclusión o prisión.
Por Damián Fernández