Para los investigadores, no hay dudas: el supuesto plan para cometer un ataque armado en una escuela secundaria de la localidad de Matheu era “una broma pesada”. Una falsa amenaza, con la aparente intención de infundir miedo en la comunidad educativa y llamar la atención, según las primeras hipótesis.
Los chats de WahtsApp que trascendieron, donde presuntos alumnos de la Escuela Media Nº2 planificaban atentar con armas contra la institución y sus compañeros, serían una lisa y llana mentira. Los investigadores que hicieron el seguimiento de los supuestos chats entre varios adolescentes determinaron que ninguno de ellos existe. O, al menos, ninguno de esos nombres pertenece a la matrícula del colegio.
Las alertas se activaron el viernes, cuando una preceptora de la escuela recibió un mensaje de WhatsApp por parte de una mujer que se presentaba con el nombre de Alejandra Ruiz y decía ser madre de un alumno de ese establecimiento.
En ese mensaje, la mujer avisaba sobre “la existencia de un grupo de estudiantes que tenían intenciones de provocar un tiroteo” en la escuela e incluso daban detalles de cómo llevarían a cabo el ataque. La fecha que mencionaban para concretarlo era ese mismo día.
Ante ello, las autoridades dieron intervención a la fiscalía del Fuero de Responsabilidad Juvenil 2. En ese marco, la funcionaria Josefina Selleart dispuso iniciar inmediatamente una investigación por “averiguación de ilícitos”.
Entre las primeras medidas, la fiscalía ordenó las “capturas de pantalla” de los chats que recibió la preceptora y la “declaración testimonial de padres del establecimiento o directivos”. En forma paralela, se implementó un operativo de prevención en el horario de ingreso de los estudiantes.
El avance de la investigación logró determinar que no existía ninguna madre de algún alumno con el nombre “Alejandra Ruiz”. Asimismo, al indagar respecto del teléfono celular utilizado para enviar los mensajes, establecieron que “no se encuentra registrado en ningún proveedor de telefonía, ni asociado a aplicación alguna” como un posible chip prepago.
En sus mensajes, la mujer le pedía a la preceptora que resguardara su identidad y le dio los nombres de cinco supuestos integrantes del grupo, los cuales no correspondían a alumnos del colegio. Otro dato sugestivo: cuando desde la escuela intentaron contactarla, no quería responder llamadas en el teléfono celular desde donde envió las denuncias. Solo aceptaba continuar la conversación por chat.
Además, los investigadores le informaron a la fiscalía que las fotos del arma exhibidas en los chats habían sido “obtenidas de la página web Pinterest”.
El supuesto intento de ataque tuvo amplia difusión en las redes, con los chats que llamaban a implementar el tiroteo en torno a la escuela que se encuentra ubicada en Alvear 71, a una cuadra de la ruta provincial 25.
La directora de la Media Nº2, Daniela Zabala, realizó una denuncia policial ante la comisaría de Matheu, siguiendo el protocolo vigente para estos casos. En forma paralela, el Municipio hizo lo propio ante la Fiscalía del Fuero de Responsabilidad Penal Juvenil 2 de Zárate-Campana. Además, la Secretaría de Seguridad envió personal policial a las inmediaciones de la institución como medida preventiva.
La escuela abrió sus puertas durante la mañana del viernes y mantuvo su funcionamiento habitual mientras se llevó adelante el procedimiento de previsto para estos casos. En ese marco, la inspectora distrital, Laura Valla, encabezó reuniones de padres con las autoridades del establecimiento. Las autoridades destacaron que “no hay ningún alumno ni situación anómala registrada” en el colegio.

En los chats presentados como reales, los adolescentes compartían supuestas tácticas para implementar el ataque, daban datos sobre la posesión de armas en casa de sus familias y brindaban detalles de cómo imaginaban la realización del atentado. Sin embargo, los investigadores concluyeron que se trataría de una broma de mal gusto, similar a las amenazas de bomba contra colegios.
Esta falsa denuncia se produjo a una semana de que se descubriera un intento de tiroteo en la Escuela Media Nº4 de Ingeniero Maschwitz. En ese caso, las autoridades creen que la adolescente que ideaba el plan en realidad no tenía la intención de concretarlo y “mucho menos los otros tres chicos, que de inmediato avisaron a sus padres”, quienes plantearon la situación en el colegio.
No obstante, la justicia dictaminó que los cuatro alumnos no pueden acercarse a menos de cien metros del establecimiento durante los próximos 120 días.