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Sin resultados. Personal de la DDI allanó el domicilio del sospechoso pero no pudo dar con él.
La víctima fue encontrada sin vida el lunes en el jacuzzi de un reconocido hotel. Habría fallecido por consumo de crack. El hombre con el que se alojó durante el fin de semana largo escapó y la DDI no pudo hallarlo en su casa.
La investigación de la muerte de una mujer de 33 años en un lujoso hotel de la ciudad santafesina de Rosario derivó este miércoles en un allanamiento a un country de la localidad de Ingeniero Maschwitz, donde viviría el hombre que se había alojado con ella durante el pasado fin de semana largo.
La investigación por la muerte de Nara Giselle Acosta, la mujer de 33 años cuyo cuerpo fue encontrado en la habitación de un céntrico hotel de Rosario tuvo novedades este miércoles cuando el fiscal del caso Adrián Spelta ordenó la detención de Ezequiel Maximiliano M., de 45 años.
Nara tenía domicilio en el barrio porteño de Colegiales y su cuerpo fue hallado el lunes a la mañana en el jacuzzi del dormitorio de la habitación 801, cuando el personal del hotel Plaza Real ingresó tras no recibir respuestas ante los llamados porque debía retirarse.
Nara se había registrado el miércoles pasado con un hombre y en el lugar había indicios de consumo de estupefacientes. Los pesquisas también hallaron los conductos de ventilación tapados, por lo que sospechan que la droga fue consumida por combustión.
El estupefaciente al que hicieron referencia es crack, un derivado del clorhidrato de cocaína que se consume fumándolo en pequeños tubos de vidrio y tiene un efecto inmediato: empieza a actuar en aproximadamente 10 segundos.
“Hay rastros de consumo de estupefacientes, elementos que se han encendido para el consumo de estupefacientes, la posibilidad de tapar la salida de humo o la no captación de ese humo por los detectores. Presumimos que estuvieron consumiendo drogas dentro de la habitación”, indicó el fiscal Spleta, quien integra la Unidad de Homicidios Dolosos de la Fiscalía de Rosario.
Por dentro. Así es el baño con jacuzzi del hotel de Rosario donde apareció sin vida Nara Acosta.
Los resultados preliminares de la autopsia, realizada bajo el protocolo de femicidio, arrojaron que la muerte se había producido el domingo por la madrugada y no había indicios de lesiones traumáticas, aunque aún resta conocerse el informe de los exámenes anatomopatológicos complementarios.
La hipótesis apunta a un deceso ocasionado por el consumo de drogas. En tanto, el auto en el que llegó la pareja hasta el hotel, un Volkswagen Vento, ya no estaba en la cochera cuando encontraron a la mujer.
Desde un principio, la investigación se centró en dar con el acompañante de la mujer, cuya identidad se conocía pero se mantuvo en reserva hasta este miércoles cuando Spelta solicitó un allanamiento para dar con el sospechoso Ezequiel Maximiliano M.
Así, personal de la Dirección Departamental de Investigaciones (D.D.I.) de Zárate. Campana llevó adelante un operativo para dar con el hombre en una casa del Maschwitz Country Club, ubicado en el kilómetro 45 de la Colectora Oeste de la autopista Panamericana. El procedimiento se concretó en las unidades funcionales 13 y 14 de la manzana 4.
Voceros del Ministerio Público de la Acusación indicaron que el sindicado no fue hallado y que su búsqueda continúa con el correspondiente pedido de captura.
Secuencia trágica
Lo que iba a ser un fin de semana largo de placer, terminó de la peor manera imaginable. Esta historia comenzó con una reserva que Nara había realizado desde la ciudad de Buenos Aires. Ella llegó el miércoles al hospedaje de la avenida Santa Fe 1632 con un hombre que sería su pareja.
Ambos se quedaron varios días hospedados y pagaron el servicio en efectivo. El domingo debían registrarse para abandonar la habitación. Como no se presentaron en la recepción, los empleados del establecimiento intentaron contactarse con ellos y no obtuvieron respuesta.
En el parte policial que confeccionaron los efectivos que llegaron al hotel tras la muerte, quedó detallado que recibieron un llamado del gerente del Plaza Real después de que los trabajadores del alojamiento ingresaran a la habitación y encontraran el cuerpo ensangrentado en el jacuzzi.
La mujer no pudo ser identificada hasta horas más tarde, luego de que la confundieran con un hombre por el avanzado estado de descomposición de su cadáver debido al tiempo que estuvo dentro del agua.
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