Protesta de choferes de la línea 60: reclaman un sueldo básico de $100.000

Decenas de trabajadores se manifestaron frente a la terminal de la empresa, en Maschwitz, y amenazaron con cortar la Panamericana. “Los salarios fueron devorados por la inflación y no cubren la canasta básica”, aseguran.

Al borde. Los choferes  amenazaron con cortar el tránsito de la autopista, pero al final no lo hicieron.

Decenas de trabajadores se manifestaron frente a la terminal de la empresa, en Maschwitz, y amenazaron con cortar la Panamericana. “Los salarios fueron devorados por la inflación y no cubren la canasta básica”, aseguran.

Con banderas y bombos, decenas de trabajadores de la línea 60 de colectivos se manifestaron este jueves al mediodía frente a la terminal de la empresa, en Ingeniero Maschwitz, para reclamar un aumento salarial que eleve el sueldo básico a $100.000.

La protesta se dio en medio de fuertes cuestionamientos a la Unión Tranviaria Automotor (UTA), el principal sindicato del sector, comandado por el gremialista Roberto Fernández, que fue convocado por el ministro de Trabajo, Claudio Moroni, para discutir la paritaria.

Los choferes de la línea 60, que cubre el trayecto entre Escobar y el barrio porteño de Constitución, obstruyeron el ingreso a los galpones que la empresa MONSA tiene en Maschwitz, sobre la Colectora Oeste, y amenazaron con cortar el tránsito en la autopista Panamericana para expresar sus discrepancias con la negociación oficial para definir los sueldos del sector.

«Los trabajadores están muy preocupados por esa negociación que encabeza la UTA y se mantendrán en asamblea permanente para determinar los pasos a seguir», señaló Néstor Marcolín, uno de los delegados de base.

El personal reclama la duplicación de los actuales ingresos para llegar a un salario básico de $100.000. “Los salarios no cubren el valor de la canasta básica”, aseguró Marcolín.

También exigen la equiparación de los haberes de las áreas de técnica y de administración con los de los choferes, que fueron declarados «esenciales» en la emergencia sanitaria.

“Los sueldos fueron devorados por el proceso inflacionario”, concluyó el representante de base. Por ahora, el conflicto sigue abierto.

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