Un operativo policial con tintes cinematográficos culminó en Belén de Escobar con la detención de dos hombres de 30 y 31 años, tras una intensa persecución de quince kilómetros por la autopista Panamericana. Los fugitivos, que habían escapado de un control de rutina, circulaban en un auto robado y llevaban 300 gramos de cocaína.
El incidente sucedió el domingo a la noche, cuando un Volkswagen Polo blanco evadió un control vehicular en el peaje de Henry Ford, que está a la altura del kilómetro 34. Según trascendió, durante la fuga el vehículo embistió a un efectivo de la Policía Vial.
A partir de ese momento comenzó una intensa persecución que involucró a móviles de la Policía Vial, del Comando de Patrullas de Escobar, de la comisaría Escobar 1ra y a efectivos del Grupo de Policía Motorizada (GPM). Tras casi quince kilómetros huyendo por la autopista, los ocupantes del Polo decidieron entrar a la ciudad, pero no lograron que les pierdan el rastro.
La persecución finalizó en la intersección de las calles Esquiú y 12 de Octubre, donde está el predio de fútbol de Sportivo Escobar. Al verse acorralados, los dos hombres bajaron del auto y trataron de escapar a pie, pero los agentes los interceptaron y redujeron.
Cuando inspeccionaron el Polo, los efectivos policiales se llevaron una sorpresa: en su interior había 300 gramos de cocaína fraccionada en varios envoltorios. También había 400 mil pesos en efectivo, teléfonos celulares y otros elementos que podrían ser de interés para la investigación.
Además, al averiguar los datos del rodado determinaron que tenía la patente adulterada y pedido de secuestro activo desde diciembre de 2023, luego de que fuera robado en el partido de La Matanza.
Los imputados se encuentran detenidos y a disposición de la justica. El Día de Escobar pudo saber que se trata de Mauro Peralta (30) y Adrián Martínez (31), ambos con domicilio en la ciudad de Zárate.