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Estupor. El lamentable episodio generó conmoción en la estación de servicio de la avenida San Martín.
El trágico hecho ocurrió esta mañana, en un establecimiento de la avenida San Martín. Momentos antes de tomar la fatal determinación, dejó un mensaje de despedida en un estado de WhatsApp.
Un trágico hecho ocurrió este lunes a la mañana en una estación de servicio de la avenida San Martín, en Belén de Escobar, donde una mujer policía se quitó la vida de un disparo en el pecho con su arma reglamentaria.
La mujer fue identificada como Natalia Sandoval, de 39 años, separada y oriunda de la localidad de Beccar, en el partido de San Isidro. Era madre de dos nenas y un varón.
El hecho ocurrió alrededor de las 11 en la estación de servicio ubicada en la esquina de la avenida San Martín y la calle Felipe Boero. Según trascendió, la mujer ingresó al baño y se disparó con su arma reglamentaria en el pecho, mientras el patrullero en el que circulaba estaba estacionado en el playón.
Dentro del móvil se encontraba una compañera suya, que al escuchar el disparo fue rápidamente a ver qué pasaba. Al ingresar, encontró a Sandoval tirada en el suelo, con una herida cerca del corazón y desangrándose.
La mujer fue trasladada con urgencia al hospital provincial Enrique Erill, distante unas pocas cuadras, pero cuando llegó nada se podía hacer. Su muerte ya era un hecho consumado.
Antes de tomar la tremenda decisión de quitarse la vida, la mujer había publicado un estado en su WhatsApp donde revelaba el crítico momento que estaba pasando emocionalmente.
“Cuando uno llega al límite de la gente de mierda, de la desconfianza, de la tristeza, de la angustia, de la desilusión, del vacío constante, del abismo… pasan estas cosas”, escribió, casi a modo de despedida. En su página de Facebook también pueden verse publicaciones en las que expresa angustia y bronca por situaciones de su vida personal y familiar.
Sandoval era oficial subayudante de la Policía Bonaerense desde el año pasado. Antes había trabajado en la Policía Local de Escobar, donde ingresó como cadete en 2016.
Las autoridades secuestraron la pistola reglamentaria Bersa Thunder 9 milímetros con la que se disparó para llevar a cabo las pericias de rigor. La causa fue caratulada «suicidio».
El lamentable suceso generó consternación no sólo dentro de la Policía Bonaerense sino también en la comunidad en general.
