Dos personas fueron detenidas acusadas de integrar “La Banda de los V6”. Les encontraron un arma oculta bajo un jacuzzi. Por la misma investigación se hicieron 15 allanamientos en otros distritos con resultados impactantes.
Dos personas fueron detenidas este miércoles en una casa del country Náutico Escobar, en el barrio El Cazador, sospechadas de formar parte de una banda delictiva que hacía entraderas y le robaba droga a narcotraficantes para revenderla. En el allanamiento se encontró una pistola oculta bajo un jacuzzi, entre otros elementos.
La captura de los dos sospechosos se dio en el marco de un megaoperativo llevado a cabo por la Policía con más de una decena de procedimientos en diferentes puntos del Conurbano bonaerense y el saldo de once detenidos. Todos ellos formarían parte de la “Banda de los V6”, bautizados así porque utilizaban camionetas Volkswagen Amarok con ese motor para cometer la gran cantidad de ilícitos que les achaca la Justicia.
La banda se dedicaba a atracar casas de countries bajo la modalidad “golpe comando”. Según trascendió, en uno de los últimos hechos, perpetrado en un barrio cerrado de Nordelta, se hicieron con 500 mil dólares. Sin embargo, la otra especialización del grupo fue el robo de drogas a bandas narcos para su posterior comercialización, conocido en la jerga como “mejicaneo”.
Llamativamente, la pista que permitió desentrañar el funcionamiento del grupo delictivo fue el crimen de uno de sus integrantes, Ezequiel Emanuel Santana, alias “Canino”, cuyo cuerpo fue encontrado en octubre en un descampado de Guernica, partido de Presidente Perón. Todo comenzó con la denuncia de su pareja, quien alertó de su repentina desaparición.
El cadáver presentaba quemaduras en el 70% del cuerpo y signos de haber sido incinerado vivo. La mujer dio a conocer los mensajes que Santana le había enviado días antes, en los que aseguraba que “Nahuel” lo había traicionado. A medida que la investigación avanzó, la trama se volvió todavía más complicada y requirió la intervención la Dirección de Investigaciones contra el Crimen Organizado.
Santana era parte de una banda cuyos integrantes, todos oriundos de Lomas de Zamora, se dedicaban a la sustracción de estupefacientes en grandes cantidades a narcotraficantes extranjeros. En las sombras, quien digitaba los pasos a seguir era conocido como “León”.
Las víctimas le eran entregadas al líder de la organización por un joven alojado en la Unidad Penal Nº 24 de Florencio Varela, y luego “marcadas” por el mismo Nahuel que habría delatado a “Canino”. Después de recibir la información aportada por el recluso, León le enviaba órdenes sobre los narcotraficantes a asaltar.
Conforme pudieron establecer los investigadores, Santana asaltó a un narco a “espaldas” de “León”. En ese hecho sustrajo una importante cantidad de dinero y de estupefacientes que intentó vender.
Para hacerlo, se contactó con Nahuel a quien intentó usar de intermediario. Pero éste, fiel a su jefe, reveló todo. Mientras tanto, “León” no perdió tiempo: se contactó con los narcos damnificados y pactó entregarles a su asaltante. Armó el encuentro en una finca de Guernica y le hizo creer a “Canino” que sus interlocutores eran potenciales compradores de la droga. Terminó siendo una emboscada.
Dentro de la organización delictiva había dos personas que vivían en una lujosa casa del country Náutico Escobar: Jorge Torres y su pareja, Shirley Rodríguez, quienes terminaron detenidos. Aunque la noticia recién empezó a circular el viernes en medios nacionales, el allanamiento tuvo lugar el miércoles, según confirmaron a a El Día de Escobar diversas fuentes.
Efectivos de la Policía Federal ingresaron por la fuerza al inmueble ubicado en el lote 581 del barrio cerrado de El Cazador, donde vive Torres, ligado al ala de drogas sintéticas y pastillas del grupo. Allí encontraron un Rolex Oyster Perpetual de oro valuado en diez mil dólares.
También incautaron una pistola, que estaba oculta bajo el jacuzzi de la vivienda. Ambos habrían asegurado tener el arma por una cuestión de seguridad, algo que no se condice con la ubicación donde la escondían.
Según información difundida por el diario Clarín, la mujer también estaba involucrada en las operaciones de la “Banda de los V6”. “Era la encargada de colaborar con la banda para ocultar los bienes obtenidos producto de dicha maniobra ilícita, utilizando el ardid de simular ser empresaria”, señala el matutino.
En principio, ambos fueron capturados e imputados por el delito de “falsificación de documentos públicos”.
Hubo un total de 15 allanamientos entre Escobar, Lomas de Zamora, Quilmes y Florencio Varela, que terminaron con un saldo de once personas detenidas.
En total, fueron secuestradas 10 armas de fuego, éxtasis, marihuana, 39 celulares, dos computadoras, cuatro tablets, 9 notebooks, un disco rígido, cinco DVR, dos cajas fuertes, dos máquinas de contar billetes, documentación, dos Volkswagen Amarok, un Audi A-5, un Toyota Etios, un Peugeot 208, un Volkswagen Crossfox, un Ford Focus, un Chevrolet Spin, una Motocicleta Gilera Smash 110 cc, una Motocicleta Suzuki, y una Moto de Agua Seadoo 1650, entre otros elementos.
La causa es llevada a cabo por el fiscal Juan Cruz Condomí Alcorta, que subroga la Unidad Funcional de Instrucción (UFI) Nº 1 descentralizada de Presidente Perón. La calificación de la investigación es kilométrica: “Asociación ilícita, robo en concurso real con privación ilegal de la libertad doblemente agravada por la participación en el hecho de más de diez personas, por tener estructura celular y por estar compuesta por personal de fuerza de seguridad o armada, robo calificado, privación ilegal de la libertad calificada por haber causado intencionalmente la muerta de la víctima y homicidio triplemente calificado por haberse cometido con el concurso premeditado de dos o más personas, enseñamiento, alevosía y criminis causa para lograr la impunidad de la comisión del delito de asociación ilícita, robo y de la privación ilegal de la libertad”.
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