La unidad fue donada al cuartel por el gobierno de Japón, en agradecimiento a Escobar por su hospitalidad. El embajador nipón entregó la llave del móvil, en un acto cargado de respeto y emoción que se realizó frente a la sede bomberil.
Al contrario de lo que marca la regla, el ulular de las sirenas que este miércoles a la tarde resonó en el centro de Belén de Escobar obedeció a un hecho por demás positivo: el cuartel central de bomberos presentó de manera oficial un autobomba hídrico con una escalera extensible de treinta metros donada por el Estado de Japón, en un acto cargado de respeto y emoción.
El convenio entre las partes se había firmado en enero, pero el desembarco de la flamante unidad en el puerto de Zárate se hizo esperar casi diez meses, por razones burocráticas. Lo cierto es que ahora los bomberos escobarenses cuentan con una nueva y vital herramienta para realizar rescates en altura, algo imprescindible en una ciudad donde la construcción de edificios es incesante.
El autobomba, marca Nissan, está valuado en unos 125 mil dólares y se suma a los 18 móviles ya existentes en el cuartel de la calle Colón. «Por este motivo, en nombre de la entidad deseo agradecer la suma de voluntades que nos permiten vivir esta fantástica realidad. Y hacer un reconocimiento muy especial para el pueblo japonés, que nos ha otorgado esta inmejorable ofrenda de amor para Escobar y su gente”, expresó el presidente de la institución, Ricardo Retta.
La contribución del Estado nipón se enmarcó en su programa de Asistencia Financiera No Reembolsable para Proyectos Comunitarios de Seguridad Humana y fue gestionada a través de la Asociación Japonesa de Escobar, cuyo presidente, Alfredo Hiki, también se mostró muy agradecido con el pueblo de sus antepasados y, especialmente, con la Embajada del Japón en Argentina: “Gracias por permitirnos ayudar a ayudar a los bomberos para profundizar aún más nuestra amistad”, destacó.
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Por su parte, el intendente Ariel Sujarchuk expresó a las autoridades niponas la gratitud de la comunidad escobarense: “Estamos muy agradecidos con el pueblo japonés por esta donación, así como orgullosos de las arduas gestiones que llevaron adelante los bomberos y la Embajada para sortear trámites burocráticos, muchas veces más complicados que apagar un incendio, y así conseguir este móvil, que ayudará a salvar vidas”.
El cónsul de la tierra del sol naciente en nuestro país, Noriteru Fukushima, fue el invitado de honor de la jornada y como último orador aprovechó la ocasión para devolver las gentilezas emanadas desde el palco de autoridades. “Yo le agradezco a Escobar porque ha recibido de brazos abiertos a los japoneses, que felizmente han podido trabajar y contribuir con esta sociedad. Muchos de ellos y sus descendientes se dedicaron a cultivar flores y, en ese sentido, Escobar se convirtió en la ciudad de la flor, con una fiesta muy importante. Por eso, arigato -gracias, en japonés- a Escobar y a la Argentina, que siempre ha ayudado a mí país cuando más lo necesitó”, expresó el diplomático.
Asimismo, les dedicó una mención especial a los bomberos voluntarios de Escobar. “Realmente están dedicando su vida, su tiempo y su trabajo para atender las necesidades de la gente. Este autombomba con escalera podría servir para llevar tranquilidad, aunque ojalá que no haya que usarlo”, concluyó Fukushima, quien le pidió al público un fuerte aplauso para todo el personal formado sobre la calle Colón.
Del acto protocolar también participaron el presidente del Concejo Deliberante de Escobar, Pablo Ramos, y el jefe del cuerpo activo de Bomberos, comandante mayor Víctor Ponce, quien fue el encargado de describir las características del móvil y la flamante escalera mecánica extensible de treinta metros, que ya tuvo su bautismo “de fuego” el miércoles de la semana pasada en el incendio del edificio Torre.
Ficha técnica
La nueva unidad de rescate, donada por el Estado japonés al cuartel central de Escobar, se trata de una autobomba hídrica marca Nissan modelo 1998, pero totalmente reciclada a nueva en suelo nipón.
Como principal cualidad, presenta una escalera mecánica extensible -la cual debe ser operada por un bombero especialmente capacitado-, que puede alcanzar los 32 metros de largo, gira en 360° y permite realizar salvatajes en altura gracias a la barquilla que posee.
“Este vehículo facilitará nuestra tarea de rescate en altura en edificios incendiados, que se podrá hacer de manera más rápida y segura. Pero también nos permitirá trabajar desde la parte superior de un incendio en lugares inaccesibles, como silos o fábricas. Nuestro personal se encuentra altamente capacitado y entrenado en materia de rescate en edificaciones altas. Solo nos faltaba esta herramienta y hoy llegó”, expresó, visiblemente emocionado, el jefe de Bomberos Voluntarios de Escobar, Víctor Ponce.