La conmoción por el ataque a machetazos de un alumno de 14 años a una compañera y a una profesora que intentó defenderla, ocurrido el martes a la mañana en una escuela secundaria del partido de Escobar, sigue generando repercusiones y arrojando nuevas revelaciones.
En las últimas horas se conocieron más detalles escalofriantes sobre la brutal agresión y el perfil del estudiante, quien habría actuado con absoluta premeditación y alevosía contra su compañera con la intención de matarla porque no quería ser su novia, según coinciden todos los testimonios.
Como se sabe, el hecho sucedió en la Escuela Secundaria 2220, que funciona al lado de la Escuela Primaria N°11, conocida como “la escuela del Lago” y ubicada en una calle interna del country CUBE, dentro del barrio parque El Cazador, en Belén de Escobar.
Un alumno de 14 años, llamado Cristian, asistió al colegio con un machete y al ingresar al aula atacó a una compañera de la misma edad, Nicole, a quien hirió en la mano. La profesora de Artística, Lorena, que estaba en el salón, intervino para impedir la agresión y también recibió dos cortes, uno cerca del ojo y otro en la nuca.
La secuencia de este gravísimo episodio, que milagrosamente no terminó de manera trágica, fue relatada con lujo de detalles a El Día de Escobar por un alumno de la institución, cuyo nombre lógicamente se mantiene en reserva por razones legales.
Relato del horror
El testimonio del alumno -al que, en adelante, se mencionará como Patricio– confirmó la hipótesis que la policía y Mónica Castrillón, la madre de la alumna atacada, contaron a los medios: el agresor estaba obsesionado con Nicole y quiso matarla porque no era correspondido afectivamente. Incluso, reveló que había llegado al punto de amenazar a su hermana.
“El pibe estaba obsesionado con la chica, intentó de todas maneras salir con ella, pero la chica no quiso y lo bloqueó en todos lados. Entonces a la hermana, que va a cuarto, le mandó fotos del fierro y le dijo: ‘Si tu hermana no me da bola, vos también vas a pagar las consecuencias” y varias cosas más’.
Sobre la cronología del hecho, precisó: “El chico entró en el colectivo de las 8, siendo que nosotros normalmente entramos en el de las 7.30, que es el de secundario; el de las 8 es para la primaria. Cuando llegó pasó directo al baño, ahí se cambió y dejó una mochila con un martillo y más armas, que después el de seguridad, si bien no nos dijo cuáles eran las otras armas, nos mencionó el martillo y nos dijo que había más”.
“Después de cambiarse en el baño, fue al curso directo a atacar a la chica. Cuando iba a atacarla, un compañero la defiende poniendo su mochila para que no le pegue el machetazo y ahí se mete la profesora. El chico le da un machetazo en la cara a la profesora y otro en la nuca. A la profesora la vi sangrando un montón. Igual, en todo momento estaba con la mano tapándose la cara, pero sangraba un montón”.
“La chica se fue corriendo del curso, salió al patio y el chico la persiguió, la tackleó contra unos bolsones y le tiró un machetazo. Se ve que ella lo atajó con la mano y por eso la hirió ahí. Cuando le va a tirar el segundo machetazo, un compañero mío lo atajó del brazo, lo desarmó y ahí entró la preceptora a abrazarlo, como reteniéndolo, y lo llevó a un aula”, contó el adolescente, que va a otro curso pero presenció la aterradora escena.
“Cuando la preceptora lo abrazó, él se puso a llorar. Después llegó el de seguridad y lo encerraron adentro del curso, siempre acompañado por algún directivo. Si bien cuando lo abrazó la preceptora se puso a llorar, después veía a compañeros asustados, veía a la profesora lastimada y se reía. Estaba mirando constantemente para afuera por las ventanas del curso y se reía”, reveló Patricio.
Mientras todo esto pasaba en el colegio se vivía una desesperación generalizada: “Los chicos de tercero salían por las ventanas y por las puertas a la calle. Cuando escuchamos gritos de “¡hay un chico con un machete!” pensábamos que había matado a alguien”.
“El colegio no hizo nada para evitar esto”
Al igual que la madre de la víctima, el alumno que brindó su testimonio a este medio también cuestionó a la directora del establecimiento. “El hecho ocurrió a las 8.10 y la directora no estaba, porque llegó tarde, cerca de las 8.40, y no dejaba pasar a las ambulancias, a Prefectura ni a los de Prevención. Entonces, la ambulancia tardó un montón en llegar para atender a la profesora”.
Además, Patricio aseguró que “el chico ya tenía antecedentes de violencia en el colegio. Primero contra un compañero, peleándose por la misma chica, le pegó una paliza y le rompió toda la ropa. Y después contra una chica, que no sé si es esta misma, que también, le quiso pegar y romper la ropa, lo mismo. Además, amenazó a la hermana mayor. Ya venía avisando que esto iba a pasar y no hicieron nada desde el colegio ni desde ningún lado para prevenir esta situación”.
“Por suerte todo esto no pasó a mayores gracias al chico que pudo desarmar al atacante, porque este chico fue a matar. Fue a matar. Todos dijeron que estaba drogado. Yo lo vi levemente cuando entró al curso, pero me fui. Solo me acuerdo de verlo riéndose y mirando por las ventanas. Vi mucha gente alterada, llorando, gritando… fue espantoso vivir esa situación”, concluyó Patricio, en un relato tan desgarrador como esclarecedor.
Por el hecho, la Subcomisaría de El Cazador instruyó un sumario caratulado “tentativa de homicidio” y dio intervención del Fuero Penal Juvenil.
Se da por descontado que el menor, domiciliado en el barrio Villa Alegre, sería expulsado del colegio. “Dicen que la familia se va a mudar a la isla”, trascendió.