Eduardo Legal estaba desaparecido desde el 20 de diciembre, cuando jugaba con hermanos y amigos en el río Paraná, en la localidad de San Lorenzo. Su cadáver apareció flotando cerca del lugar de la tragedia. Tenía 21 años.
Después de dos semanas, y cuando la búsqueda activa ya se había suspendido por falta de resultados, este lunes apareció el cuerpo del joven garinense que se ahogó en aguas del río Paraná, en la localidad santafesina de San Lorenzo.
Prefectura Naval y Bomberos Voluntarios de San Lorenzo confirmaron que el cuerpo hallado en horas de la mañana en el río Paraná, a la altura de la zona sur de la localidad, pertenece a Eduardo Esteban Legal, el joven de 21 años que se había ahogado el pasado 20 de diciembre en la Bajada Urquiza.
El cadáver apareció flotando a la altura de una guardería náutica ubicada en el límite de San Lorenzo y Fray Luis Beltrán, donde fue extraído del agua por agentes de la Prefectura. El lugar está cerca de donde se produjo el trágico episodio en el que perdió la vida.
El joven fallecido es hijo de Adrián Legal, integrante del cuerpo activo de Bomberos Voluntarios de San Lorenzo. Se había ahogado cuando estaba refrescándose en el río junto a hermanos y amigos, con quienes había ido a visitar a su padre y a pasar las fiestas.
El cuerpo fue rápidamente identificado por las prendas que vestía al momento de desaparecer.
La búsqueda activa del joven se había suspendido el viernes 24, horas antes de Nochebuena y luego de cinco intensas jornadas de rastrillajes acuáticos sin resultados positivos.
Ahora, al menos, su familia podrá darle el último adiós.
De la diversión a la tragedia
El lamentable episodio que le costó la vida a Eduardo Legal ocurrió el lunes 20 de diciembre a las 17, cuando se introdujo al rio junto a dos de sus hermanos y un amigo, a pesar de que en esa zona hay carteles que advierten sobre la prohibición de nadar por la falta de seguridad y la peligrosidad del irregular lecho.
De un segundo a otro, la diversión dio paso a la angustia cuando el muchacho dejó de hacer pie y se hundió en el agua. En un momento de desesperación llegó a asomar sus brazos pidiendo auxilio. Esa fue la última vez que lo vieron. Al principio, quienes estaban con él pensaron que era un chiste, pero pronto comprendieron la fatalidad que estaban presenciando.
“El muchacho pidió auxilio, y uno de los hermanos pensó que estaba haciendo una broma. Luego no lo vieron más”, contó a El Litoral uno de los bomberos que participó del operativo frente a la costanera central de San Lorenzo, a la altura del Campo de la Gloria.
El joven era oriundo de San Lorenzo, pero vivía junto a su madre y hermanos en Garín. Había llegado con ellos unos días atrás para pasar las fiestas con su padre, Adrián Legal, que trabaja como bombero voluntario en esa localidad y también participó de la búsqueda.
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