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Con 81 años, el popular cantante tucumano se presentará este sábado a la noche en el microestadio municipal. Un show que promete alegría, diversión y la nostalgia de despedir de los escenarios a un artista sinigual.
“Todo concluye al fin, nada puede escapar. Todo tiene un final, todo termina”, dice la canción de Vox Dei que se popularizó con su reversión para la película Tango Feroz. Y es así, siempre. Por eso, a los 81 años Ramón “Palito” Ortega decidió ponerle punto final a su prolífica carrera artística con una gira despedida que este fin de semana lo tendrá presente en Garín.
El autor de éxitos inmortales como La felicidad, Corazón contento, Despeinada, Yo tengo fe y Un muchacho como yo, entre otros tantísimos hits, se presentará este sábado a partir de las 20 en el microestadio municipal de Garín. Será su primer -y último- show en esa localidad, aunque no el primero en el partido de Escobar.
Seguramente, muchos recordarán su recital de 2019 en plena avenida Tapia de Cruz, en el marco de los festejos del 25 de Mayo que organizó el Municipio. Una multitud de todas las edades cantó y vibró con sus canciones, éxitos de todos los tiempos que han sido escuchados de generación en generación y que siempre son una invitación a la alegría.
Las entradas para el show en Garín se venden en las boleterías del microestadio (boulevard Perón 450, Garín) y del teatro Seminari (Mitre 451, Belén de Escobar). También están disponibles en el sitio web del teatro, a un valor de $2.700.
Inolvidable. El recital de Palito Ortega en la avenida Tapia de Cruz, en mayo de 2019.
Ortega lleva más de 50 años sobre las tablas, con un amplio reconocimiento en toda Latinoamérica. Ahora, pensó en el adiós de su carrera, por eso encaró este “Tour Despedida” con el que está recorriendo distintas ciudades del territorio nacional. La serie comenzó el 11 de diciembre con un show en el Luna Park.
“Hay que hacer un balance, pensar todo lo que te ha pasado y ser agradecido de que todavía estemos de pie, que tengamos la suerte de subirnos a un escenario y que la gente te reconozca y te reciba con cariño. Uno no tiene que esforzar tanto esta bendición, porque miro para atrás y veo a tantos amigos que ya no están, que han hecho canciones inolvidables, giras y películas. Entonces, bueno, yo estoy acá, todavía disfrutando, gracias a Dios”, declaró recientemente el cantante tucumano en una entrevista con Teleshow.
Nacido en un hogar humilde, desde su juventud desempeñó diversas labores para colaborar con su numerosa familia. Desde la década de 1960 integró el grupo musical El Club del Clan, que tuvo una relevante repercusión y se mantuvo durante varios años.
Además de músico, compositor y cantante, Ramón Bautista Ortega fue actor, productor discográfico y director de cine. Filmó 33 películas, entre las que se destacan Los muchachos de mi barrio (1970), Mi primera novia (1966), La sonrisa de mamá (1972), El tío Disparate (1978) y ¡Qué linda es mi familia! (1980).
Su popularidad también le abrió las puertas del mundo de la política. Entre 1991 y 1995 se desempeñó como gobernador de Tucumán y entre 1998 y 2001 fue senador por la misma provincia.
Una vida llena de éxito y reconocimiento, con una carrera artística que llega a su fin pero que se convertirá en legado y será inolvidable.
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