En una pelea que lo tuvo como protagonista absoluto, el “Correntino” se impuso por puntos y obtuvo el título de la categoría latino superligero. El fallo fue unánime y amplió su palmarés a 20 triunfos (9 KO) y 2 derrotas.
El boxeador garinense Germán Benítez (26 años y 62,600 kgs) tuvo su mejor regalo de Navidad y un inmejorable cierre de temporada en la madrugada del domingo 24: en la localidad de Ranchos, provincia de Buenos Aires, le ganó por puntos al “Principito” Martín Coggi (34 años y 63 kgs) y se quedó con el título de campeón latino superligero de la Organización Mundial de Boxeo (OMB), que estaba vacante.
“El Correntino” está en el puesto 7° del ranking argentino de los ligeros y tuvo el dominio de la pelea sobre el hijo del “Latigo”, recordado campeón de la década del ´90. En el tercer asalto le dio un derechazo cruzado que lo hizo trastabillar contra las cuerdas. Y en los últimos rounds el protagonismo fue todo del garinense, que no paró de castigar a Coggi, principalmente en el séptimo round.
Las tarjetas de los jueces indicaron una amplia diferencia a favor del ganador: Jorge Basile 96-94, Carlos Azzinnaro 98-92 y Néstor Savino 97-93.
Ahora, Benítez extiende su palmarés a 20 victorias (9 por KO), 2 derrotas y 1 combate sin decisión.
En 2016, el púgil del gimnasio Corrientes Box había sido campeón latino interino de la OMB y en septiembre peleó en Escobar ante Elías Araujo, que defendió el cinturón interino latino ligero del Consejo Mundial de Boxeo y se quedó con el triunfo en fallo dividido.
Esta vez tuvo revancha y demostró que su carrera vuelve a estar en ascenso.
Por Javier Rubinstein