El Concejo sancionó una nueva ordenanza por las tierras fiscales del Paraná

Los concejales aprobaron una modificación de la norma sancionada en 2018 especificando la superficie ribereña que el Municipio puso en venta. Fue ante el requerimiento de una medida cautelar, que así quedaría sin efecto.

Remodelación. Parte de la puesta en valor de la costanera se financió con el dinero de las tierras vendidas.
Los concejales aprobaron una modificación de la norma sancionada en 2018 especificando la superficie ribereña que el Municipio puso en venta. Fue ante el requerimiento de una medida cautelar, que así quedaría sin efecto.

En una sesión especial que tuvo lugar este sábado al mediodía, el Concejo Deliberante de Escobar sancionó una ordenanza complementaria para dejar definitivamente resuelta la venta de una parcela fiscal en la costanera del Paraná de las Palmas, que había sido objetada por una resolución judicial.

La sesión se convocó con el único propósito de subsanar una omisión en la redacción de la ordenanza 5538/2018, sancionada en abril de 2018 por 21 votos a favor y 2 en contra. En aquella norma se aprobó, con ciertos condicionantes, la venta parcial de una parcela fiscal ribereña de 41.000 metros cuadrados, pero no se especificó la superficie que efectivamente sería enajenada por el Ejecutivo, ya que hasta entonces no había sido subdividida.

Este punto fue observado por el Juzgado en lo Contencioso Administrativo Nº1 de Campana, a cargo de la jueza Mónica Ayerbe, quien el lunes de la semana pasada emitió una medida cautelar en la que suspendió el efecto de la ordenanza 5538 hasta tanto se subsane esa omisión: es decir, hasta que se indique con precisión la superficie a vender por el Municipio. La resolución fue en respuesta a un recurso de amparo presentado hace un año por el Consejo de Productores del Delta, que se opuso desde el vamos a la venta de esas tierras, que estaban usurpadas por emprendimientos privados.

La reacción del oficialismo ante este fallo fue inmediata. Por eso se convocó a una sesión un sábado -algo de lo más inusual-, a fin de no dejar pasar más tiempo y resolver cuanto antes el requerimiento judicial. Así, se sancionó una ordenanza en la que se modifica el artículo primero de la anterior al precisar que la superficie a desafectar del uso público es de 16.000 metros cuadrados.

El proyecto de ordenanza, que fue presentado por el concejal Juan Carlos Toledo, recibió 19 votos favorables, sumando las manos del oficialismo, del Frente Renovador y casi todos Cambiemos, menos las de Carina Chmit, que se abstuvo, y Diego Castagnaro, que votó en contra. Ambos, con distintos argumentos, fueron los únicos que se habían opuesto a la ordenanza de 2018.

La sesión tuvo tres ausentes: Daniel Bufelli, Viviana Gaitán y Cristian Vila, y quien la presidió fue el concejal macrista Leandro Costa, quien estuvo a cargo del Concejo Deliberante en reemplazo de Pablo Ramos, que se desempeñó interinamente en la Intendencia hasta el domingo por el viaje de Ariel Sujarchuk a Estados Unidos.

La polémica que en su momento despertó la venta de esas tierras fiscales en la ribera escobarense quedaría definitivamente zanjada con la sanción de esta ordenanza, que la jueza Ayerbe exigió como condición para autorizar la operación, mediante la cual el Municipio se hizo de 15 millones de pesos que invirtió en la puesta en valor de la costanera, recientemente inaugurada por el intendente Ariel Sujarchuk.

Un dato no menor es que la venta se realizó con cargo: en esa superficie, la empresa Estruc S.A. desarrollará un proyecto de servicios náuticos, gastronómico y comercial que requerirá una inversión de $167 millones, según publicó en marzo la revista DIA 32. Su plazo de ejecución se estima en tres años.

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