Había sido denunciado por sus vecinos ante las autoridades. En su domicilio le encontraron 296 gramos de cocaína, 237 de marihuana y un revólver calibre 44.
A raíz de una denuncia realizada por sus propios vecinos, un hombre mayor de edad fue detenido días atrás en la localidad de Maquinista Savio acusado de comercializar estupefacientes.
El procedimiento se llevó a cabo el pasado miércoles 22 en un domicilio del barrio Amancay, a unas diez cuadras de la ruta provincial 26, donde el sospechoso fue sorprendido por personal de la Delegación de Drogas Ilícitas (DDI) Zárate-Campana, de la Estación de Policía Departamental de Escobar y de la Secretaría de Seguridad.
En el allanamiento a la vivienda donde fue aprehendido le encontraron 63 envoltorios con cocaína fraccionada y una bolsa con la misma sustancia en estado pulverulento -sin fraccionar-, por un peso total de 296 gramos.
Los uniformados también hallaron y decomisaron un trozo de marihuana y varios envoltorios de la misma sustancia con un peso de 237 gramos.
En el domicilio también había un revólver calibre 44 Special marca Smith & Wesson, entre otros elementos de interés para la causa, de acuerdo a la información suministrada a El Día de Escobar por fuentes policiales.
La investigación se inició tras una denuncia anónima realizada por vecinos mediante la aplicación “Ojos y Oídos en Alerta”, que daba aviso sobre la comercialización de cocaína y marihuana en algunas esquinas del barrio y en viviendas ubicadas sobre las calles Tulipanes y Chingolo por parte de un individuo conocido como “El Flaco”, de quien no trascendieron otros datos.
Una vez reunidos y documentados la totalidad de los elementos probatorios, a través de seguimientos y tareas de inteligencia, la fiscalía liberó la orden de allanamiento al domicilio donde fue capturado el sospechoso, quien contaría con la complicidad de familiares.
Por lo pronto, «el Flaco» quedó imputado por “tenencia de estupefacientes con fines de comercialización en concurso real con comercio de estupefacientes», de acuerdo a la carátula impuesta por el fiscal Matías Ferreiros.
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