Apareció Marcia Reyes, la joven que llevaba diez días sin regresar a su casa

Fue hallada esta madrugada caminando por la ruta provincial 26, en Maquinista Savio. “La tenían secuestrada, está golpeada y tiene quemaduras de cigarrillo”, afirmó su hermano. La versión oficial es totalmente distinta.

Viva. La aparición de la joven cerró una búsqueda angustiante de sus familiares y abrió nuevos interrogantes

Fue hallada esta madrugada caminando por la ruta provincial 26, en Maquinista Savio. “La tenían secuestrada, está golpeada y tiene quemaduras de cigarrillo”, afirmó su hermano. La versión oficial es totalmente distinta.

Después de diez días de angustia y desesperación, la búsqueda de Elizabeth Marcia Reyes llegó a su fin: la joven de 29 años que llevaba diez días sin regresar a su hogar apareció este lunes a la madrugada en la localidad de Maquinista Savio.

Sobre la aparición de Reyes hay dos versiones, diametralmente opuestas. En lo único que coinciden es que ocurrió alrededor de la 1 de la madrugada, cuando caminaba por la ruta provincial 26, cerca de las vías del tren.

Según la versión oficial, la solitaria presencia de la mujer llamó la atención del personal de la Policía Local que patrullaba las inmediaciones de la estación. Dos oficiales se acercaron para identificarla y así resolvieron el misterio.

«Estaba en buen estado general, lúcida e higienizada», afirmó una fuente del caso, que adquirió alcance nacional este domingo con la denuncia que su padre realizó en varios medios de comunicación masivos.

A primera hora de la mañana, el intendente Ariel Sujarchuk hizo una publicación en las redes sociales dando a conocer la buena noticia. «Encontramos sana y salva a Marcia», decía el título del texto, donde el jefe comunal también afirmó que estaba «en buen estado de salud».

Sin embargo, desde la red de organizaciones feministas que acompañó el reclamo por su búsqueda y aparición circuló una versión totalmente opuesta. Dijeron que fue ella quien se acercó al patrullero, que estaba «descalza y con golpes en su cuerpo» y que declaró que había estado «encerrada e incomunicada en contra de su voluntad».

Su hermano Ezequiel, en tanto, declaró que «la tenían secuestrada, está golpeada y tiene quemaduras de cigarrillo».

Las fuentes policiales consultadas por El Día de Escobar no revelaron las declaraciones que formuló la joven ni deslizaron ninguna hipótesis. «Es un tema que está manejando el fiscal y no queremos entrometernos. Quizás oportunamente ella o alguien de su familia lo haga público», expresó un allegado a la investigación.

Actualmente la joven se encuentra en la casa de su padre, con quien vive hace tres meses, en Ingeniero Maschwitz. Aún no habría visto a sus cuatro hijos, que viven con su abuela, en la localidad de Benavídez.

El fiscal de la causa, Claudio Aundjian, había ordenado que el domingo a la noche se llevaran a cabo una serie de diligencias policiales en el partido de Tigre, pero ninguna dio resultado positivo. Lo mismo pasó en el allanamiento a la casa de su ex pareja con perros rastreadores, que no encontraron ningún indicio de que la joven haya estado en ese lugar.

Reyes había sido vista por última vez el viernes 24 de abril a la tarde, en la casa de su padre. Dijo que iba a entregar un celular que había vendido por las redes sociales (ver nota acá). Supuestamente se encontraría con el comprador cerca de la fábrica Ford, en General Pacheco. Pero nunca habría llegado a ese destino. Y nadie pudo comunicarse con ella porque su teléfono daba apagado.

Desde entonces, el reclamo por su búsqueda y aparición se fortaleció con el impulso de amigas y conocidas, organizaciones feministas e incluso la intervención de la Dirección de Género del Municipio, que llegó a cuestionar el desempeño de las fuerzas policiales en la investigación.

Lo que pasó durante estos diez días sólo ella lo sabe. Lo único cierto, por ahora, es que está viva, en su casa y en familia.

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