Hasta ahora, las obras en la calle Rivadavia avanzan sin grandes contratiempos

“Venimos con el avance que teníamos programado”, aseguró el secretario de Infraestructura del Municipio Diego Benítez. Y anunció que está por rehabilitarse el tramo comprendido entre Spadaccini y Travi. La obra comenzó el 8 de agosto.

Renovadas. Las veredas de la calle Rivadavia fueron niveladas y uniformadas con baldosas rojas y grises.

“Venimos con el avance que teníamos programado”, aseguró el secretario de Infraestructura del Municipio. Y anunció que está por rehabilitarse el tramo comprendido entre Spadaccini y Travi.

Pese a la tormenta del fin de semana pasado y otras lluvias que hubo desde que empezaron las obras, el miércoles 8 de agosto, la remodelación de la calle Rivadavia avanza de acuerdo a los tiempos previstos, según aseguraron desde el Municipio.

El nuevo hormigón colocado entre Travi y Spadaccini está prácticamente listo y las veredas ya fueron renovadas casi por completo. Solo restan detalles para que se habilite ese primer tramo, para que los colectivos puedan dar la vuelta. La siguiente etapa sería extender el tránsito hasta la avenida Tapia de Cruz.

“Venimos con el avance que teníamos programado, dentro de los plazos previstos y estudiando las posibilidades de hacer habilitaciones parciales”, señaló el secretario de Infraestructura, Diego Benítez, en declaraciones a El Día de Escobar.

“El plazo es el que había marcado el Intendente: para el 1º de diciembre todo lo que es Rivadavia ya va a estar terminado, inclusive la obra de la terminal”, ratificó.

Además, el funcionario reveló algunas de las particularidades del trabajo que se está realizando: “Es una obra bastante compleja por todo lo que había abajo. Si bien teníamos los planos, sabíamos que las instalaciones nos iban a jugar una mala pasada. El agua, las cañerías de luz y la fibra óptica estaban declaradas pero en lugares completamente distintos de lo que estaba señalado”, explicó.

Indicaciones. El ingeniero Benítez habla con el intendente Sujarchuk, en una recorrida nocturna por la obra.

A su vez, destacó la importancia de las obras hidráulicas en la zona, donde la empresa AySA renovó doscientos metros de cañerías que se encontraban dañadas y producían filtraciones que deterioraban el pavimento. “No vamos a tener problemas con el agua por unos cuantos años”, vaticinó, optimista.

El costo total de la obra, incluyendo la remodelación de la terminal, es de $50 millones, de los cuales el Municipio aporta $27 millones y la Provincia los otros $23 millones.

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