Un espeluznante suceso conmocionó a los habitantes de un edificio de la avenida Tapia de Cruz al 1300, en Belén de Escobar, donde un hombre de 44 años decidió quitarse la vida arrojándose desde el balcón de su departamento, ubicado en el quinto piso.

El dramático hecho tuvo lugar este lunes alrededor de las 5 de la madrugada, cuando el hombre se lanzó desde el balcón de su departamento al patio interno del edificio, que linda con el polideportivo municipal y el Concejo Deliberante. Vecinos del lugar dieron aviso a la Policía, que rápidamente se hizo presente y constató el deceso del individuo, en un contexto que por ese momento no estaba del todo claro.

Los agentes se encontraron con un hombre tendido boca abajo, sin signos vitales y con traumatismos que sugerían una caída desde una altura considerable. Minutos después, personal del SAME certificó el fallecimiento de quien en vida fuera Miguel Ángel Pérez, de 44 años. El hombre era comerciante: tenía un local de reparación de celulares.

Pérez alquilaba un departamento del quinto piso del edificio. En su interior, los investigadores observaron desorden, electrodomésticos rotos, manchas de sangre en el baño y un revólver calibre 32 largo. Sin embargo, no detectaron signos de violencia en las aberturas. Eso y otros indicios echaron por tierra que pudiera haberse tratado de un hecho de inseguridad.

La Policía Científica, tras una primera revisión, determinó que el hombre presentaba una herida de arma de fuego en la sien derecha, sin orificio de salida. Este hallazgo añadió complejidad a la investigación inicial de una caída.

“Vecinos del fallecido declararon haber escuchado ruidos de objetos arrojados al suelo desde aproximadamente las dos de la madrugada, varias horas antes del descubrimiento del cuerpo”, relataron voceros policiales a El Día de Escobar.

Con el correr de las horas, el avance de la investigación despejó los interrogantes iniciales. “El hombre sufrió un brote psicótico. Se había escapado dos veces de Open Door y estaba bajo tratamiento psiquiátrico ambulatorio”, ampliaron las mismas fuentes. Según la reconstrucción del hecho, Pérez intentó suicidarse de un disparo y falló. Por eso se arrojó desde el balcón de su departamento, decidido a ponerle punto final a su vida.

Este nuevo caso se suma a una larga lista de suicidios que vienen ocurriendo en el partido de Escobar y que ponen en evidencia la grave problemática de la salud mental. Según los especialistas, se trata de un fenómeno global que se acentuó a partir de la pandemia y que, con distintos grados de trastornos, alcanza a un cuarto de la población argentina.

Prevención y asistencia al suicida

Frente a la sospecha de que alguien pueda tener pensamientos suicidas o ante las señales que indiquen que está en riesgo, es fundamental buscar ayuda en algún servicio especializado. Además, para las personas en crisis existen líneas de atención telefónica que brindan orientación de forma anónima y gratuita.

En el partido de Escobar, el Municipio tiene una línea de asistencia en urgencias de salud mental y prevención del suicidio. Es el 11-7107-9958 y funciona las 24 horas. Ante una situación de crisis se puede dar aviso al 911, Defensa Civil (103) o Atención al Vecino (147).

A su vez, el Hospital de Salud Mental y Adicciones “Papa Francisco” ofrece apoyo y contención a quienes lo necesiten. El establecimiento está en la calle Carlos Pellegrini 439, a metros de la entrada a Belén de Escobar. Su teléfono de contacto es: 0348 443-0544.

Por otra parte, el Centro de Atención al Suicida (CAS) atiende 18 horas diarias, de forma anónima, gratuita y voluntaria. La técnica que utiliza es la “escucha activa”, con intervenciones orientadas a que el consultante hable. La línea es gratis llamando desde CABA o Gran Buenos Aires; y los números (011) 5275-1135 o el 0800-345-1435 son para todo el país.

Ante un posible caso de suicidio también se puede llamar al 0800-222-5462. Esta línea depende de la Subsecretaría de Salud Mental, Consumos Problemáticos y Violencias de la provincia de Buenos Aires.