Un vecino se contactó con El Día de Escobar para alertar sobre la situación que ocurre cerca del paso bajo nivel. “Los vehículos salen a alta velocidad y no hay nadie que los frene”, señala.
Al Director de El Día de Escobar
Sr. Ciro D. Yacuzzi
De mi consideración:
Me dirijo a Usted a fin de dar a conocer a través de este medio la siguiente problemática. Soy vecino de la calle Pablo Podestá y, desde que hicieron el túnel, era obvio que iban a pasar aproximadamente 100 autos por hora. Ese no es el inconveniente, el tema es que casi no hay reductores de velocidad.
Ya hicimos el reclamo a la Municipalidad hace un mes y no hay novedades. Esto va a ocasionar un accidente a corto plazo, ya que los vehículos salen a alta velocidad y no hay nadie que los frene. También faltarían cámaras de seguridad.
Si bien hay un lomo de burro en la salida del túnel y otros dos en esa misma esquina, en la continuación de la calle no hay nada.
Antes de que construyan el túnel siempre se reclamaron lomadas, porque los pibes iban a colear con los autos en la rotonda de Colón y Pablo Podestá. Siempre fue un peligro. Y ahora más, ya que el fluido de autos es mucho mayor y a alta velocidad, que ni siquiera nos dejan acceder al garaje de nuestras casas.
A mi entender, tendría que haber mínimo dos lomadas por cuadra: Pablo Podestá tiene 2 cuadras. Contando la única que tiene, tendrían que hacer siete reductores más.
Parece que hicieron la foto, levantaron todo y se fueron. Nunca más les prestaron atención a las necesidades y más cuando se gastaron en decir que es el primer túnel de Escobar y bla, bla, bla.
Muchas gracias por el espacio. Saludos.
Ricardo Quagliano (Belén de Escobar)