
El momento de los incidentes en CADU. El local ganaba por un triple.
Tras haber ganado la primera final en Escobar el 9 de septiembre por 73 a 66, Sportivo jugaba el último viernes el segundo encuentro final en el gimnasio de Defensores Unidos, en la ciudad de Zárate. Si ganaba ese partido se consagraba campeón -una vez más- de la Asociación de Básquet; sino, habría un tercer enfrentamiento.
Los escobarenses jugaron la segunda final con normalidad, no había habido durante los 39 minutos de juego altercado alguno. El local ganaba 71 a 68 y faltaban solamente 37 segundos para el cierre, pero ahí comenzaron los incidentes.
Miembros de la barra de Defensores (algunos los relacionan con hinchas del equipo de fútbol) se acercaron a los hinchas visitantes y los increparon. Algunas versiones indican que les robaron un redoblante y no los dejaban alentar. Los hechos fueron cobrando más dramatismo y familiares de jugadores de Sportivo fueron víctimas de robos de elementos personales, como teléfonos celulares, cámaras y carteras…
La policía habría tardado en intervenir y además los efectivos no eran suficientes. Las denuncias fueron radicadas en la comisaría de Zárate.
El caos fue generalizado y el partido fue suspendido por los árbitros Joaquín Albertinsky, Raúl Imosi y Luis Ranzini. El informe de ellos será evaluado por el Tribunal de Disciplina de la Asociación, junto al descargo de los respectivos clubes, y se tomará una decisión acorde a la dimensión de los incidentes.
Se especula que podría haber una importante sanción para el club de Villa Fox, aunque es una incógnita qué resolución habrá a nivel deportivo: si el partido seguirá o no, o si se le dará por ganado a Sportivo. Como sea, otra vez el deporte fue salpicado por los violentos.
Por Javier Rubinstein
Fotografía: Cortesía InfoZC