Que en un barrio cerrado haya una capilla no es algo tan usual. Pero mucho menos lo es que la gente se agarre a empujones y trompadas en la puerta del templo, como pasó días atrás en un country de la localidad de Ingeniero Maschwitz.
El bochornoso suceso ocurrió en el barrio privado San Benito, situado en el límite entre los partidos de Escobar y Tigre, donde funciona la capilla y la sede central de la Orden San Elías, a cargo del sacerdote Javier Olivera Ravasi.
Para algunos, se trata de una secta católica de extrema derecha, cuyo líder es muy cercano a la vicepresidente electa Victoria Villarruel, según reveló un reciente artículo del diario Perfil.
La Orden San Elías nació en 2016. La fundó el padre Olivera Ravasi, luego de que abandonara el Instituto del Verbo Encarnado (IVE), señalada como una secta católica “de las más extremistas y peligrosas” que funcionó en Argentina por el periodista Alfredo Silletta, en un artículo que publicó el portal Info135.
El IVE fue clausurado por el Papa Francisco hace dos años, luego de comprobarse una serie de abusos sexuales por parte de su mentor, Carlos Miguel Buela. Este grupo, que surgió en San Rafael, Mendoza, se caracterizaba por dar misa en latín, usar sotanas negras y negar los preceptos del Concilio Vaticano II.
El IVE utilizaba técnicas de captación y manipulación, por lo cual tuvo un crecimiento exponencial en todo el país. Al cumplir la mayoría de edad, los adeptos se iban a vivir a la comunidad de San Rafael. Muchos de ellos rompían sus vínculos familiares y de amistad y se entregaban a las órdenes de Buela, un sacerdote muy vinculado a carapintadas y militares de la última dictadura.
Cuando el escándalo por los abusos de Buela ya no se podían tapar, Olivera Ravasi y el padre Federico Highton decidieron dejar el Instituto del Verbo Encarnado y fundar su propio grupo, al que llamaron Orden San Elías, con lineamientos idénticos al IVE donde se habían formado.
El padre del sacerdote Olivera Ravasi es el mayor del Ejército Jorge Antonio Olivera, condenado a prisión perpetua por crímenes de lesa humanidad ocurridos en San Juan durante la última dictadura cívico militar.
La misión de San Elías
La nueva congregación tiene como meta evangelizar, y según expresan en su sitio web, el Vaticano los habría enviado con misiones al Sikkim, norte de la India, a Laos y Malawi. Allí estaría instalado el padre Highton, mientras que en la zona de Ingeniero Maschwitz se encuentra Olivera Ravasi.
El grupo está instalado en el barrio privado de San Benito, en Ingeniero Maschwitz, propiedad de Jorge O’Reilly, hombre del Opus Dei, quien en 2009 intentó, junto al cardenal Ángelo Sodano, destituir al arzobispo Jorge Bergoglio del Arzobispado de Buenos Aires para colocar en su lugar al ultraconservador ex obispo de La Plata, monseñor Héctor Aguer, según revela el artículo del portal Info135.
En San Benito tienen la capilla, donde se oficia la misa Tridentina (de espaldas y en latín), algo que el Papa Francisco restringió a más no poder en 2021. Ese tipo de misa debe ser autorizada por el obispo, en este caso de la Diócesis Zarate-Campana, a cargo de Pedro Laxague.
Desde hace varios meses, muchos padres habrían denunciado que sus hijos ingresaron al grupo y se alejaron de sus familias. Como sucedía en el IVE, a los jóvenes se los aísla y se busca la ruptura de vínculos familiares, además de inculcarles una ideología de extrema derecha.
El diario Perfil publicó a mediados de noviembre los vínculos del padre Olivera Ravasi con la vicepresidenta electa Victoria Villarruel, que además de su cercanía con el sacerdote es muy cercana a grupos extremistas católicos como la Fraternidad San Pío X, otra comunidad conservadora que promueve las misas en latín y niega el Concilio Vaticano II.
Es común encontrar en X (antes Twitter) mensajes de aliento de Ravasi a Villarruel. Cuando se buscan sus apellidos en internet, aparece una charla que hicieron el 24 de marzo de 2021 titulada “Día de la memoria, ¿hemipléjica?”, donde ambos niegan la lucha de los organismos de derechos humanos.
En los últimos tiempos, Olivera Ravasi inauguró las Academias San Elías como un sistema paralelo de la educación oficial, una especie de colegio virtual para los jóvenes. La idea es instruirlos de manera no tradicional para evitar el intercambio con otros profesores y jóvenes que piensen diferente.
Dice Ravasi en un video oficial de la Academia que la idea es educar “hijos para el cielo”. Lo llamativo del video es que aparece hablándole a los niños sobre la importancia del uso de las armas para “defender a Dios, a la Patria y a la familia”, y agrega que los niños “pueden ir entrenándose con armas espirituales y armas corporales”.
El artículo de Info135 consigna que últimamente, quizás a partir del triunfo electoral de La Libertad Avanza, el grupo del padre Olivera Ravasi “se puso muy agresivo contra los vecinos del barrio privado que cuestionan que la capilla, que pertenece a todos los vecinos, sea controlada solamente por los seguidores de Ravasi”.
Piñas, empujones y gritos
Un video que se conoció en las últimas horas reveló una situación llamativamente violenta en la puerta de la capilla del barrio San Benito. La filmación muestra a varias personas discutiendo de manera acalorada, algunas a los empujones y otras lanzando trompadas.
También se escuchan acusaciones cruzadas como “chorros”, “dejen de robar” y “no vengan a patotear”, mientras que varias personas no cesan de golpear las manos y tocar las bocinas de sus autos, en tanto que otras registran la tensa y confusa escena con sus teléfonos celulares.
El mencionado artículo periodístico señala que “una patota amenazó y golpeó a vecinos que se acercaron a la capilla con la intención de expresar su descontento con el grupo. Los vecinos del barrio señalaron que la capilla y la escuela se construyeron para todos y no para que Olivera Ravasi y su gente se apropien de la misma”.
El Papa Francisco, en una extensa charla con Jorge Fontevecchia, habló de su preocupación sobre estos grupos extremistas: “Hay movimientos católicos donde a los jóvenes los sectarizan; algunas congregaciones nuevas fundadas en Argentina que forman seminaristas sectarios, cerrados. Tuvimos que disolver tres congregaciones nuevas en la Argentina por esta mentalidad sectaria, cerrada, que en el fondo hay una presunción de salvadores de la Patria”.
Al parecer, el Episcopado argentino está preocupado por el funcionamiento de este nuevo grupo, su ideología de extrema derecha y las técnicas de manipulación, por lo cual ya ha informado al Vaticano.
💒 A las piñas en la puerta de una capilla: escándalo en un country de Maschwitz
— El Día de Escobar (@eldiadeescobar) December 5, 2023
El bochornoso episodio ocurrió en el barrio San Benito, donde está la sede de la Orden San Elías.
Denuncian que es un grupo que usa controvertidas técnicas de captación. https://t.co/dL3Mi1iuza pic.twitter.com/NULNbNWn7k