Concejales oficialistas y opositores debatieron sobre la situación en Bolivia. Además, se aprobó la venta de una parcela fiscal a una empresa de Garín y se convalidó una donación de $12 millones de la Fundación Perez Companc.
Por algunos minutos, el recinto del Concejo Deliberante de Escobar pareció transformarse en la Asamblea de la Organización de Estados Americanos (OEA) o de las Naciones Unidas (ONU), donde concejales oficialistas y opositores se tomaron su tiempo para debatir sobre el golpe de Estado ocurrido este fin de semana en el vecino país de Bolivia.
Ese tema fue uno de los principales de la 18º sesión ordinaria, la primera desde las elecciones generales del 27 de octubre, que se llevó a cabo este miércoles a la mañana. Como ocurrió varias veces con respecto a la situación que se vive en Venezuela, varios ediles se calzaron el traje de diplomáticos para analizar asuntos internacionales que nada tienen que ver con la realidad del partido de Escobar.
“No podemos iniciar la sesión sin mencionar lo que está pasando. Yo pido que todos repudiemos el golpe de Estado en Bolivia, donde el presidente Evo Morales fue obligado a renunciar”, afirmó Cristian Romano, del Frente de Todos, abriendo la discusión.
En el mismo sentido fueron sus compañeros de interbloque Nicolás Serruya y Gonzalo Fuentes Arballo.
Incluso Diego Castagnaro, estrenando su monobloque Acción Comunal Escobar (ver nota acá), también se sumó a condenar lo que está sucediendo en el país vecino, aunque con reparos: “Lo que se vivió en Bolivia es un golpe de Estado y hay que repudiarlo, pero tampoco desconocer que se falseó la voluntad popular y se ha hecho fraude”, manifestó.
La única voz discordante fue la de Esteban Colley, titular de la bancada de Juntos por el Cambio, quien destacó que el poder en Bolivia “no lo detentan” los militares o las corporaciones sino los sucesores constitucionales, que van a llamar a elecciones. “Se están sacando conclusiones equivocadas en base a premisas en las que todos estamos de acuerdo. No puedo decir que hay un golpe de Estado, así que no me sumaré al rechazo”, expuso.
Primera sesión del Concejo Deliberante tras las elecciones generales.
Los concejales debatieron sobre la situación en Bolivia. Además, aprobaron la venta de una parcela fiscal en Garín y una donación de $12 millones de la Fundación Perez Companc. https://t.co/7x84MOWFp9 pic.twitter.com/37H6ak6psQ
— El Día de Escobar (@eldiadeescobar) November 13, 2019
Otro momento álgido de la sesión fue cuando el oficialismo buscó la aprobación de un proyecto de ordenanza para autorizar la venta de una parcela a la empresa logística Logarte SRL, ubicada en la localidad de Garín.
Desde la oposición cuestionaron la celeridad con la que se impuso el tratamiento sobre tablas del expediente. “Recibí una copia a las 11:10 y la sesión comenzó a las 11:30, no lo pude leer aún”, expresó la concejal macrista Carina Chmit.
Pero el Frente de Todos hizo pesar su predominio en las bancas y sancionó la ordenanza con el voto mayoritario de 14 concejales propios. Chmit votó en contra y los demás concejales macristas se abstuvieron.
Por otra parte, el Concejo aprobó por unanimidad un convenio entre el Municipio y la Fundación Pérez Companc, que aportará $12 millones para la construcción del colegio de la UBA. También por unanimidad, se declaró de interés legislativo la 2º Marcha del Orgullo LGBTIQ, que se realizará el sábado 23 en Belén de Escobar.
La sesión -una de las últimas de 2019- duró poco más de una hora y contó con la presencia de 20 concejales. Los ausentes fueron Mabel Ponce, Federico Taiano, Cristian Vila (Juntos por el Cambio) y Patricia de la Cruz (Frente de Todos).
Por Alejo Porjolovsky