La Secretaría de Obras Públicas realizó este jueves 19 a la mañana la apertura de sobres de la licitación para repavimentar once kilómetros de la ruta provincial 25, en el trayecto comprendido entre las barrancas de El Cazador y el puerto del Paraná de las Palmas.
El costo estimado de la obra, financiada con fondos del Ministerio de Planificación Federal, ronda los cien millones de pesos. Para la adjudicación, el Municipio analizará las ofertas presentadas por tres empresas: Maquivial S.A., Centro Construcciones S.A. y Grupo Constructora S.A. y Viame S.A. (estas dos últimas se presentaron juntas a la licitación).
Las firmas contratistas no variaron demasiado en la cotización del trabajo, por lo que la carpeta técnica y la capacidad financiera serán aspectos decisivos a la hora de definir la adjudicación.
La repavimentación está prevista en tres tramos, prácticamente similares (hasta el puente del río Luján, hasta el Jardín Náutico y hasta el puerto), lo que abre a los funcionarios la posibilidad de adjudicar la obra por partes a más de una empresa. De hecho, los oferentes debieron cotizar cada “lote” por separado.
“Como la ruta está muy dañada, se van a levantar todos los paños de hormigón y se va a hacer a nuevo el paquete estructural, sobre el cual se va a colocar una capa de hormigón de veinte centímetros. Es un trabajo muy similar al que se hizo en la ruta 9”, explicó en declaraciones a la prensa el secretario de Obras Públicas de la Comuna, Rubén Cabrera.
El proyecto de la obra prevé mantener el ancho actual de la calzada, a cuyos costados se agregará una banquina de piedra. También se va a realizar la señalización y la pintura vial correspondiente. La iluminación de la ruta, en tanto, deberá esperar a otro momento.
En cuanto a los tiempos de ejecución de los trabajos, lo previsto en el pliego de bases es un año, pero Cabrera señaló que ese plazo podría resultar relativo en función de los inconvenientes que puedan aparecer y retrasar la obra. El funcionario también sostuvo que el Municipio ejercerá un firme control sobre las distintas etapas de la repavimentación. “Vamos a estar continuamente encima de la obra, como lo hacemos con todas”, afirmó.
El titular de Obras Públicas, además, reconoció que los trabajos van a generar severas dificultades en el tránsito vehicular. “Estamos considerando todos los recaudos posibles para tratar de molestar lo menos posible a los vecinos, pero igual sabemos que se van a generar inconvenientes”, señaló al respecto.
Primera etapa, en marcha
La repavimentación de la ruta 25 se dividió en dos etapas. Y la primera ya está en marcha. Es la que va desde la calle Gelves hasta la entrada de El Cazador –son 3,5 kilómetros de la avenida San Martín-, a lo que se agregaron 300 metros de la avenida Tapia de Cruz.
A cargo de la empresa Neuén, los trabajos comenzaron en enero con la reparación y el cambio de los paneles de hormigón más dañados. “Algunos paños fallaron y se tuvieron que hacer de vuelta”, explicó Cabrera.
Cuando esa parte esté terminada, se colocará sobre el hormigón existente una carpeta asfáltica de ocho centímetros de espesor. El costo total de la obra ronda los ocho millones de pesos y también es absorbido por el ministerio que comanda el arquitecto Julio De Vido.
Cabrera y otros funcionarios, este jueves a la mañana, realizaron la apertura de sobres en la Casa de la Cultura.
La Secretaría de Obras Públicas realizó este jueves 19 a la mañana la apertura de sobres de la licitación para repavimentar once kilómetros de la ruta provincial 25, en el trayecto comprendido entre las barrancas de El Cazador y el puerto del Paraná de las Palmas.
El costo estimado de la obra, financiada con fondos del Ministerio de Planificación Federal, ronda los cien millones de pesos. Para la adjudicación, el Municipio analizará las ofertas presentadas por tres empresas: Maquivial S.A., Centro Construcciones S.A. y Grupo Constructora S.A. y Viame S.A. (estas dos últimas se presentaron juntas a la licitación).
Las firmas contratistas no variaron demasiado en la cotización del trabajo, por lo que la carpeta técnica y la capacidad financiera serán aspectos decisivos a la hora de definir la adjudicación.
La repavimentación está prevista en tres tramos, prácticamente similares (hasta el puente del río Luján, hasta el Jardín Náutico y hasta el puerto), lo que abre a los funcionarios la posibilidad de adjudicar la obra por partes a más de una empresa. De hecho, los oferentes debieron cotizar cada “lote” por separado.
“Como la ruta está muy dañada, se van a levantar todos los paños de hormigón y se va a hacer a nuevo el paquete estructural, sobre el cual se va a colocar una capa de hormigón de veinte centímetros. Es un trabajo muy similar al que se hizo en la ruta 9”, explicó en declaraciones a la prensa el secretario de Obras Públicas de la Comuna, Rubén Cabrera.
El proyecto de la obra prevé mantener el ancho actual de la calzada, a cuyos costados se agregará una banquina de piedra. También se va a realizar la señalización y la pintura vial correspondiente. La iluminación de la ruta, en tanto, deberá esperar a otro momento.
En cuanto a los tiempos de ejecución de los trabajos, lo previsto en el pliego de bases es un año, pero Cabrera señaló que ese plazo podría resultar relativo en función de los inconvenientes que puedan aparecer y retrasar la obra. El funcionario también sostuvo que el Municipio ejercerá un firme control sobre las distintas etapas de la repavimentación. “Vamos a estar continuamente encima de la obra, como lo hacemos con todas”, afirmó.
El titular de Obras Públicas, además, reconoció que los trabajos van a generar severas dificultades en el tránsito vehicular. “Estamos considerando todos los recaudos posibles para tratar de molestar lo menos posible a los vecinos, pero igual sabemos que se van a generar inconvenientes”, señaló al respecto.
Primera etapa, en marcha
La repavimentación de la ruta 25 se dividió en dos etapas. Y la primera ya está en marcha. Es la que va desde la calle Gelves hasta la entrada de El Cazador –son 3,5 kilómetros de la avenida San Martín-, a lo que se agregaron 300 metros de la avenida Tapia de Cruz.
A cargo de la empresa Neuén, los trabajos comenzaron en enero con la reparación y el cambio de los paneles de hormigón más dañados. “Algunos paños fallaron y se tuvieron que hacer de vuelta”, explicó Cabrera.
Cuando esa parte esté terminada, se colocará sobre el hormigón existente una carpeta asfáltica de ocho centímetros de espesor. El costo total de la obra ronda los ocho millones de pesos y también es absorbido por el ministerio que comanda el arquitecto Julio De Vido.