Cuatro días después del violento y resonante ataque a un local partidario del duhaldismo que impulsa la precandidatura a intendente del abogado y ex funcionario Ricardo Santo, el Municipio salió a fijar su posición en un comunicado de prensa que expresó repudio, desligó responsabilidades y deslizó suspicacias.
“La Municipalidad de Escobar repudia firmemente los acontecimientos que, aun poco claros, dejan a la vista una violencia que no debemos permitir”, consignó el primer párrafo del texto oficial.
Desde la Comuna también replicaron a las acusaciones que Santó lanzó sobre el intendente Sandro Guzmán y el jefe de Gabinete, Walter Blanco, a quienes señaló como los autores intelectuales del hecho, cometido por más de medio centenar de exaltados jóvenes y adolescentes.
En ese sentido, el parte oficial destacó que “el alerta y el rápido accionar de la policía y de la justicia fue producto del buen trabajo del Centro de Monitoreo y de los agentes de la Dirección de Prevención Comunitaria Municipal, quienes de inmediato informaron lo sucedido”. A la vez que facilitaron “con máxima rapidez y de manera eficiente las imágenes captadas por las cámaras de seguridad”.
Por lo expuesto, el Municipio se desligó “de cualquier responsabilidad que Ricardo Santo quiera imponer a través de sus denuncias en los medios de comunicación”. Y advirtió que “las mismas serán respondidas a través de la vía legal, como corresponde, y no en el show mediático que Santo intenta montar”.
Asimismo, el comunicado agregó que el otrora comisario de la Bonaerense y ex secretario de Gobierno de Luis Patti se encuentra imputado en dos causas (2.303/10 y 7.285/10) “por amenazas y atentados anónimos en los domicilios de integrantes del Ejecutivo Municipal”.
“Los acontecimientos parecen sospechosos. Pero será la Justicia quien tenga la última palabra y se expida al respecto”, concluyeron desde el Municipio.
Por el caso fueron detenidas 18 personas que recuperaron su libertad a las pocas horas. Antes de que eso ocurra, sorprendió ver en las adyacencias de la comisaría 1ra a funcionarios municipales y concejales, cuya presencia no fue aún explicada y generó las más diversas interpretaciones.
La causa, por lo pronto, está en manos de la fiscal Paula Gaggiotti, quien tiene la misión de echar luz sobre este oscuro y -hasta ahora-confuso episodio.