El sorpresivo cierre de la sucursal de la calle Mitre del Banco Provincia, en Belén de Escobar, produjo como lógica consecuencia la permanente generación de largas colas en su edificio principal de la avenida Tapia de Cruz.
Aunque no hubo una notificación oficial, trascendió de fuentes bancarias que el cierre del otrora Centro de Atención Rápida (foto) se debió a que dos de los cuatro empleados asignados se jubilaron, por lo que al no haber nuevos nombramientos de personal se decidió cerrar sus puertas.
Así, todas las operaciones y servicios que presta la banca provincial se concentraron en un mismo lugar, para malestar de la gente y pesar del personal, que no tiene un segundo de respiro.