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Una vez más, los bomberos voluntarios dieron muestras de tenacidad y compromiso en el cumplimiento del servicio.
El verano está en pañales, pero las sofocantes e históricas temperaturas ya están dejando graves consecuencias. Esta tarde, siete dotaciones de bomberos voluntarios debieron combatir un voraz incendio en una quinta de Garín donde se almacenan neumáticos en desuso.
El incendio se originó cerca de las 13 en una propiedad de calle Carranza y Beliera, en el barrio La Madrugada de Garín. A raíz del alerta, los servidores públicos llegaron rápidamente al predio y se encontraron con un panorama bastante complejo, por la extensión del mismo y las poderosas lenguas de fuego que amenazaban con seguir creciendo.
Luego de tres horas de intensa y denodada labor, los bomberos pudieron sofocar las llamas y evitar así la propagación a viviendas linderas. Si bien no hay información oficial al respecto, el incendio se habría producido por la quema de una vasta cantidad de cubiertas en desuso que se encontraban acopiados en la quinta.
El abrasador calor de la ignición se sumó a la asfixiante temperatura, lo que generó un fuerte malestar en el físico de algunos bomberos que debieron ser atendidos prontamente. Más allá de esto y de las visibles columnas de humo que llegaron a la ruta Panamericana, el voraz incendio por suerte solo dejó como saldo pérdidas materiales.
La gruesa columna de humo se extendió hasta la autopista Panamericana, aunque no causó problemas de visibilidad.
Fotos: Gentileza El Garinense
