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Romera estuvo quince meses al frente de la comisaría 1ra y antes había tenido un breve paso por la Jefatura Distrital.
La Jefatura Policial del Distrito tiene nuevo titular. Después de haber estado al mando del comisario inspector Marcelo Guerra durante casi cuatro años, el 1º de noviembre asumió en su lugar el comisario Gabriel Gustavo Romera (47), quien desde agosto de 2012 se encontraba al frente de la comisaría Escobar 1ra.
Conocedor de la geografía y la problemática delictual del municipio -el año pasado también tuvo un breve paso por la Distrital-, el funcionario policial oriundo de Rojas habló con EL DIA de Escobar de los objetivos de su gestión, el flagelo de la droga, los reclamos de los vecinos y la presencia de la Gendarmería. “Espero tener una estadía larga para poder cambiar algunas cosas”, sostuvo.
¿Cuál es el estado de situación del distrito en torno a la inseguridad?
A nivel distrital creo que por conflictividad la prioridad hoy la tiene Garín. Lo más preocupante es el tema del robo a mano armada y de la droga, que está todo relacionado y a eso estamos apuntando. Creo tener algún puntito a favor por la excelente relación que tengo con la Secretaría de Seguridad del Municipio y apuntamos a trabajar en conjunto con Walter Gómez para hacer un plan de seguridad distinto de cara al año 2014.
¿Qué lineamientos tendría ese plan?
Con los recursos que tenemos, que no son los ideales, ir descomprimiendo los problemas chiquitos rápidamente y también en forma puntual lo que es Garín, en principio. Lo que hablamos con Gómez es hacer un análisis y un trabajo rápido con la Fiscalía General y con la Fiscalía temática de Drogas para conjugar nuestras tareas con la gente de Narcotráfico.
Queremos trabajar más prolijo y siempre basándonos en respetar los derechos humanos. Y, por otro lado, con las fiscalías queremos reunirnos para trabajar de la misma forma con todos y bajar línea a las comisarías y destacamentos que tenemos para que haya más operatividad y darle más idoneidad y profesionalismo a la cuestión de los papeles, para que la fiscalía tenga más elementos probatorios al momento de pedir una detención y que realmente todos los aprehendidos que tenemos, que son muchos, no puedan escapar por un error administrativo.
Teniendo en cuenta su experiencia en Escobar 1ra, ¿cuáles son los delitos más recurrentes en la zona?
Belén de Escobar es todo centro y la gran problemática es el robo de autos. Comparándola con Garín, tiene grandes diferencias pero alguna similitud en el tema drogas. El robo y la droga tienen mucha relación, porque la gente de bajos recursos que es adicta necesita salir a robar para comprar esas drogas. Yo no estoy en contra del enfermo, del adicto, pero hay que tratar, a través de estos procedimientos, de llegar a quienes comercializan para evitar la posterior comisión de ilícitos que ponen en riesgo la vida humana.
Un reclamo vecinal vox populi a la Policía es que la persona que va a realizar una denuncia está más tiempo en la comisaría que el delincuente que le robó. ¿Piensa hacer algo al respecto?
La idea es contrarrestar todo esto y hacer más ágil la recepción de la denuncia, más ágil el llamado al 911 y de que una vez aprehendida y posteriormente detenida una persona, si la fiscalía lo aprueba, sea todo lo contario. Que el damnificado, la víctima de cualquier hecho, sienta que tiene seguridad y que el delincuente quede adentro.
Su antecesor, Marcelo Guerra, había deslizado la idea de profundizar la presencia de Gendarmería y lograr expandirla a otras localidades del partido. ¿Usted va a seguir esa línea?
La idea es la misma y si podemos poner más empeño en estos pedidos lo vamos a hacer. Siempre con la colaboración de los superiores y del Municipio. Vamos a intentar que lo que actualmente se está haciendo en el centro de Escobar se haga en todas las localidades. Además, esperamos la llegada en diciembre de entre 20 y 26 efectivos policiales provenientes de la Escuela de Campana y de más patrulleros.
Actualmente se ven en la calle policías, preventores municipales y gendarmes, incluso muchas veces en un mismo lugar. Con tanta presencia de uniformes, ¿bajo el índice delictivo o sigue todo igual?
En algunos rubros ha bajado y en otros se ha desplazado producto de la presencia de gendarmes en el centro de la ciudad, como por ejemplo, el robo de autos. Esto demuestra que el servicio brindado ayuda, pero se ha corrido el robo a la periferia.
¿Cuál es su principal objetivo para esta nueva etapa de la Jefatura Distrital?
Fundamentalmente, la prevención, evitar que se cometan todo tipo de ilícitos. Sabemos que es imposible llegar a cero, pero trataremos de tener una mayor presencia, mejorar la imagen policial y cambiar la relación entre la policía y la comunidad. Además, del robo de autos en Belén, vamos a apuntar con todo al problema primordial de las drogas, que es lo que más escucho en toda la zona y lo que más me preocupa. Y no es que quiera hacer una caza de brujas en cuanto al adicto-enfermo, sino realmente al narcotraficante, los que comercializan y son los mercaderes de la muerte. Espero tener una estadía larga para poder cambiar algunas cosas.
Por Damián Fernández
