A teatro lleno, la presentación del historiador y escritor Felipe Pigna en Escobar, este viernes 6 a la noche, contó con el saludo anfitrión del intendente Sandro Guzmán, quien le hizo entrega de un presente en reconocimiento a su visita.
La charla debate tuvo un tono ameno. El orador destacó las diferencias de aquella militancia de los setenta con las actuales generaciones y relevó los hechos que llevaron a cometer errores insalvables de la historia contemporánea y sus conocidas consecuencias.
Además, resaltó la importancia geopolítica que comienza a tener la Ley de Servicios Audiovisuales argentina -solicitada para su estudio por otros países- y sus expectativas de que, en el corto plazo, vaya tomando toda su dimensión.
El punto de mayor efervescencia (que levantó en loas a los presentes y ofuscó visiblemente a algunos jóvenes del grupo organizador “Hagan correr la voz”) fue acaparado por una joven del público que preguntó sobre las incongruencias de quienes, en democracia, han ocupados cargos preponderantes junto a Luis Patti y hoy aparecen representando un “proyecto de cambio”, refiriéndose implícitamente al actual intendente, entre otros. Pero fue apocada por el moderador y Pigna se disculpó por el desconocimiento del caso.
Posteriormente, el invitado resaltó su admiración hacia el interés de los jóvenes por la política y la militancia.
El cierre del evento fue encallando en una pequeña reseña de los proyectos en los que Pigna viene trabajando.
Mano a mano con la prensa
Ya en un ambiente más íntimo, durante la conferencia de prensa que ofreció en el camarín del teatro Seminari, el historiador expresó algunos de sus beneplácitos y expectativas personales.
“Es posible el cambio, porque hay una nueva generación que tiene ideas con una base propia. Hay que trabajar para que estos jóvenes tengan la posibilidad de inclusión, de lugares de contención en polideportivos, escuelas, fuentes de trabajo, y de la posibilidad de acceder a porciones de poder. Que ellos sean parte del cambio, no solo desde la militancia sino desde la posibilidad real que da la política, del gobierno”.
“Eso es lo que uno espera cuando dice que a esta generación no se la puede frustrar; no dejarla en la eterna militancia, o sea que debe pasar de la militancia a la acción, que hoy en día. Por suerte, no quiere decir una lucha contra los molinos de viento sino empezar a trabajar en política para cambiar las cosas en cada distrito; que haya un límite de edad, así cada nueva persona militante pueda ir teniendo responsabilidades para cambiar las cosas”.
“Creo que esa es la gran diferencia con los que nos pasó a nosotros en los años setenta, donde evidentemente el poder era algo inaccesible y se tornó finalmente en enemigo”.
Pigna también expresó la sensación que le dejó el encuentro: “Me encanta que haya jóvenes que estén buscando elementos para pensar, para cambiar, para formarse. Me parece extraordinario y también me encanta que aparezca el disenso, es lo mejor que nos puede pasar. Y que nos escuchemos, porque sucede que mucha gente que reclama ser escuchada, a su vez, no escucha. Creo que esto es una lección que debemos ir aprendiendo; sino cometemos los mismos errores que criticamos. Y esto se debe a la falta de práctica de debate”.
“Debatir no es hacer valer nuestra palabra. Los debates deben tener más sabor a escuchar cosas nuevas que a repetir lo que nosotros sabemos”, advirtió.
Con respecto a la intervención que tuvo una de las jóvenes presentes en el debate (la más aplaudida de la sala) refiriéndose a los personajes que continúan en el poder, ¿qué reflexión dejaría para aquellos integrantes de la sociedad que psicosocialmente estuvieron de acuerdo y votaron a genocidas y para aquellos que hoy ocupan algunos lugares de poder?, le preguntó El Día de Escobar.
Primero, me excuso por no estar informado de la situación de cada lugar al que concurro. En cuanto a los votantes, uno debe tener una actitud comprensiva porque la gente se puede equivocar, como pasó en Tucumán y en otros lados. Y también habrá que revisar qué hizo la oposición en ese momento para que los votos vayan para ese lado… Ahora, el reciclado de algunos personajes me parece lamentable.
Por Ariel J. Spadaro
El Intendente saludó la visita de Pigna y le regaló un recordatorio.
A teatro lleno, la presentación del historiador y escritor Felipe Pigna en Escobar, este viernes 6 a la noche, contó con el saludo anfitrión del intendente Sandro Guzmán, quien le hizo entrega de un presente en reconocimiento a su visita.
La charla debate tuvo un tono ameno. El orador destacó las diferencias de aquella militancia de los setenta con las actuales generaciones y relevó los hechos que llevaron a cometer errores insalvables de la historia contemporánea y sus conocidas consecuencias.
Además, resaltó la importancia geopolítica que comienza a tener la Ley de Servicios Audiovisuales argentina -solicitada para su estudio por otros países- y sus expectativas de que, en el corto plazo, vaya tomando toda su dimensión.
El punto de mayor efervescencia (que levantó en loas a los presentes y ofuscó visiblemente a algunos jóvenes del grupo organizador “Hagan correr la voz”) fue acaparado por una joven del público que preguntó sobre las incongruencias de quienes, en democracia, han ocupados cargos preponderantes junto a Luis Patti y hoy aparecen representando un “proyecto de cambio”, refiriéndose implícitamente al actual intendente, entre otros. Pero fue apocada por el moderador y Pigna se disculpó por el desconocimiento del caso.
Posteriormente, el invitado resaltó su admiración hacia el interés de los jóvenes por la política y la militancia.
El cierre del evento fue encallando en una pequeña reseña de los proyectos en los que Pigna viene trabajando.
Mano a mano con la prensa
«El reciclado de algunos personajes me parece lamentable», afirmó Pigna ante la prensa.
Ya en un ambiente más íntimo, durante la conferencia de prensa que ofreció en el camarín del teatro Seminari, el historiador expresó algunos de sus beneplácitos y expectativas personales.
“Es posible el cambio, porque hay una nueva generación que tiene ideas con una base propia. Hay que trabajar para que estos jóvenes tengan la posibilidad de inclusión, de lugares de contención en polideportivos, escuelas, fuentes de trabajo, y de la posibilidad de acceder a porciones de poder. Que ellos sean parte del cambio, no solo desde la militancia sino desde la posibilidad real que da la política, del gobierno”.
“Eso es lo que uno espera cuando dice que a esta generación no se la puede frustrar; no dejarla en la eterna militancia, o sea que debe pasar de la militancia a la acción, que hoy en día. Por suerte, no quiere decir una lucha contra los molinos de viento sino empezar a trabajar en política para cambiar las cosas en cada distrito; que haya un límite de edad, así cada nueva persona militante pueda ir teniendo responsabilidades para cambiar las cosas”.
“Creo que esa es la gran diferencia con los que nos pasó a nosotros en los años setenta, donde evidentemente el poder era algo inaccesible y se tornó finalmente en enemigo”.
Pigna también expresó la sensación que le dejó el encuentro: “Me encanta que haya jóvenes que estén buscando elementos para pensar, para cambiar, para formarse. Me parece extraordinario y también me encanta que aparezca el disenso, es lo mejor que nos puede pasar. Y que nos escuchemos, porque sucede que mucha gente que reclama ser escuchada, a su vez, no escucha. Creo que esto es una lección que debemos ir aprendiendo; sino cometemos los mismos errores que criticamos. Y esto se debe a la falta de práctica de debate”.
“Debatir no es hacer valer nuestra palabra. Los debates deben tener más sabor a escuchar cosas nuevas que a repetir lo que nosotros sabemos”, advirtió.
– Con respecto a la intervención que tuvo una de las jóvenes presentes en el debate (la más aplaudida de la sala) refiriéndose a los personajes que continúan en el poder, ¿qué reflexión dejaría para aquellos integrantes de la sociedad que psicosocialmente estuvieron de acuerdo y votaron a genocidas y para aquellos que hoy ocupan algunos lugares de poder?, le preguntó El Día de Escobar.
– Primero, me excuso por no estar informado de la situación de cada lugar al que concurro. En cuanto a los votantes, uno debe tener una actitud comprensiva porque la gente se puede equivocar, como pasó en Tucumán y en otros lados. Y también habrá que revisar qué hizo la oposición en ese momento para que los votos vayan para ese lado… Ahora, el reciclado de algunos personajes me parece lamentable, sentenció Pigna.
Por Ariel J. Spadaro