-
-
La carroza de la Asociación Japonesa se llevó el primer premio.
Todo Escobar salió a la calle este sábado a la nochecita para sentir de cerca la emoción de la fiesta popular local más importante del año. La avenida Tapia de Cruz se llenó de música, color, alegría y belleza con la presencia de las dieciséis aspirantes a Reina Nacional de la Flor que será elegida este domingo, desde las 17, en el anfiteatro de la Ciudad Floral.
Familias, chicos, jóvenes y adultos, alegres y distendidos, se ubicaron sobre las veredas de la principal avenida escobarense para presenciar la fiesta que se desarrolló partiendo desde el polideportivo Luis Monti, en dirección a la plaza principal, por Tapia de Cruz hasta Mateo Gelves y desde allí hasta el predio floral.
Pasadas las 7 de la tarde, y con un cielo azul que parecía puesto adrede para que hiciera de perfecto telón de fondo, comenzó el tradicional desfile de carrozas florales. Desde el palco oficial, el intendente Sandro Guzmán y el presidente de la Fiesta de la Flor, Tetsuya Hirose, entre otras autoridades, participaron del evento. Saludaron con gestos a las posibles futuras reinas y se esforzaron por atajar las hermosas flores frescas que cada una de ellas les arrojó al pasar frente al palco.
La señal de que el desfile estaba comenzando fueron los acordes tocados por la Banda de la Prefectura Naval. Ya había oscurecido cuando los primeros participantes, pertenecientes a escuelas, asociaciones y grupos artísticos, comenzaron a acercarse. Detrás de ellosdesfilaron autos, motos, jeeps y hasta una autobomba Pontiac de 1929 que hace 50 años está al servicio de los bomberos de Escobar. La murga “Los Bohemios” de Del Viso, con 150 personas bailando al ritmo de la batucada, fue la encargada de levantar la temperatura y darle paso -manifestación universitaria mediante; ver artículo El reclamo…– a lo que todos esperaban: el 48º desfile de carrozas organizado por la Fiesta Nacional de la Flor.
Miss Argentina, Antonella Kruger, fue la primera en aparecer seguida de las reinas de diferentes fiestas típicas de varias regiones de Argentina. Sobre el carro oficial de la Fiesta, representada por dos caballos imponentes parados en dos patas, cubiertos íntegramente por flores, desfiló la reina Nacional de la Flor 2010, Janet Ocampo, a horas de entregar su trono. La Guardia Floral Municipal iba detrás de ellas.
Luego, cinco carrozas transportaron a la flamante Reina del Capullo, Melina Sorato, junto a su séquito y a las aspirantes de este año. Iban escoltadas por los boy scouts de Savio y de Garín.
El trabajo de todo un año de los floricultores se vio reflejado en las doce carrozas. Cada una representando un tópico en particular. Las otras once que siguieron a la carroza oficial fueron realizadas por el Municipio, la filial Racing Club de Garín, la Agencia Hípica Escobar, Bioparque Temaikén, la Asociación Japonesa, la Colectividad Boliviana, el Instituto de Florihorticultura, Alparamis, Club Boca Juniors, la Cooperativa Argentina de Flores y la Asociación Folklórica Isleña.
Varios grupos de danzas amenizaron el espectáculo. El grupo Los Tobas, con su ballet folklórico boliviano, se destacó por sus coloridos trajes y una demostración de danza ancestral muy particular. Por su parte, los Dança Nova mostraron ritmos afro brasileños.
Cuando ya todas las carrozas habían pasado llevando a las aspirantes a reinas, diferentes agrupaciones gauchas hicieron su paso a caballo. Llegando ya el final de la fiesta, que duró casi dos horas, una hermosa tropilla de caballos blancos sirvió de despedida para un momento inolvidable.
Las tres premiadas
La carroza ganadora fue la de la Asociación Japonesa, que insumió más de 15.000 flores en su armado. Estuvo inspirada en el pez Koi, pez nacional del Japón, y la leyenda Koi-Nobori, símbolo de fortaleza, coraje y perseverancia.
Por su parte, el segundo lugar correspondió a la carroza de Temaikén, que utilizó 12.000 flores en su producción y rindió homenaje a los wallabies, representantes de las tierras australianas. El tercer premio, en tanto, fue para Boca Juniors, que presentó la “Carroza Xeneixe” llevando el corazón gigante de la familia boquense en su diseño de más de 6.500 flores.
Por Florencia Alvarez
