Desde las primeras semanas de enero, escuadrones de gendarmes se encuentran distribuidos en distintos lugares del distrito para apoyar a la policía en tareas preventivas. Esto se da en el marco del denominado “Plan Centinela”, que prevé la asignación de seis mil efectivos de la Gendarmería Nacional en todo el territorio bonaerense.
Operativos de saturación, tanto fijos como móviles, donde se intenta disuadir a los delincuentes con una robusta presencia de efectivos de seguridad, son parte de la estrategia de trabajo que desarrollan los hombres de verde para colaborar en ponerle freno a uno de los principales problemas de la sociedad.