La investigación por el violento asalto a una pareja de adultos mayores ocurrida a principios de agosto en Belén de Escobar sumó en las últimas horas dos nuevos detenidos, que se agregan a otros dos capturados hace quince días. Según la Policía, se trata de una banda que se dedicaría a cometer entraderas contra jubilados en distintas lugares del Conurbano bonaerense.
El aberrante caso tuvo como víctimas a Guido Fiamengo, de 89 años, y su esposa de 82, quienes el pasado 5 de agosto a la madrugada fueron sorprendidos en su vivienda por al menos tres delincuentes armados mientras dormían. Los maniataron y los mantuvieron cautivos durante casi tres horas, bajo amenazas de muerte, hasta huir con dinero, joyas y otros objetos de valor.
A partir de ese hecho, la DDI de Escobar inició una investigación que derivó en varios allanamientos. El primero se realizó el 14 de agosto en el partido de Lomas de Zamora, donde la Policía detuvo a un hombre de 56 años y su hijo de 30, ambos de apellido Cativa, además de incautar armas de fuego, municiones, pasamontañas, un teléfono celular y una camioneta Ford Ecosport negra.
Con el análisis de los teléfonos celulares secuestrados, los investigadores lograron establecer la identidad de otros presuntos integrantes de la organización. Así fue como el último viernes se realizaron nuevos procedimientos en Burzaco, partido de Almirante Brown, donde fueron arrestados César Pablo Fuentes, de 45 años, y Analia Vanesa Gayyetta, de 48.

Durante esos operativos también se incautaron dos teléfonos celulares, alhajas varias y un Ford Fiesta Kinetic gris. Presuntamente, ese sería uno de los vehículos que utilizaban para cometer los robos. Según fuentes policiales, la banda no solo actuaba en Escobar: también se movía en jurisdicciones vecinas.
Sobre el modus operandi, fuentes policiales consultadas por El Día de Escobar señalaron que los delincuentes “realizaban visitas domiciliarias haciéndose pasar por encuestadores o consultores para recabar información sobre las víctimas y sus rutinas. Posteriormente, aprovechando la madrugada y el estado de indefensión de los moradores, perpetraban los robos en esas viviendas”.
Todos los detenidos quedaron a disposición de la fiscal Mabel Amoretti, de la Unidad Funcional de Instrucción Nº5, y del Juzgado de Garantías Nº4 de Escobar.
La causa está caratulada “robo agravado por el uso de arma de fuego con escalamiento en poblado y en banda”.
🚔 Asaltaron y golpearon a un matrimonio de jubilados en Escobar: están presos
— El Día de Escobar (@eldiadeescobar) August 19, 2025
La Policía detuvo en Lomas de Zamora a un hombre de 56 años y a su hijo, de 30, como autores de la violenta entradera, ocurrida hace dos semanas. Un cómplice está prófugo. https://t.co/5OGZNwmQvZ pic.twitter.com/TT7kE3tkn0
Tres horas de violencia
El hecho que motivó la investigación ocurrió en la madrugada del martes 5 de agosto, en una vivienda ubicada en la intersección de las calles Don Bosco e Hipólito Yrigoyen, en Belén de Escobar.
Alrededor de la una de la madrugada, tres delincuentes armados forzaron las rejas de una ventana y sorprendieron a los moradores, Guido Fiammengo, de 84 años, y Lidia Varcelli, de 82 años, mientras dormían.
Una vez dentro, actuaron con absoluta crueldad y sin importarles la indefensión de sus víctimas. Los maniataron en la cocina y los amenazaron con armas de fuego, llegando incluso a advertirles que les cortarían los dedos si no les entregaban más dinero.
Tras permanecer más de tres horas sometidos a los delincuentes, las víctimas fueron despojadas de dinero en efectivo -cerca de medio millón de pesos-, una escopeta marca Vagual 1670 y un revólver 32 marca Miguelsson.
El rastro de las camionetas
Tras el violento asalto, los investigadores centraron su trabajo en reconstruir el recorrido de los delincuentes bordo de dos camionetas, una negra y otra blanca, utilizadas para fugarse del lugar del hecho.
A través de un exhaustivo análisis de imágenes de cámaras de seguridad y declaraciones de testigos, se pudo ubicar a los vehículos en distintos puntos del partido de Lomas de Zamora, lo que permitió avanzar en la identificación de los sospechosos.
Las tareas de inteligencia y la vigilancia encubierta posibilitaron a las fuerzas de seguridad ubicar las residencias donde se movían los autores del hecho. Esto permitió vincular directamente a padre e hijo, quienes contaban con antecedentes en entraderas.
El seguimiento de las camionetas fue clave para esclarecer la el hecho, permitiendo que los efectivos de la Comisaría 1ª de Escobar, la Jefatura Departamental y la Delegación Departamental de Inteligencia Zárate-Campana coordinaran los allanamientos que culminaron con la detención de los Cativa y el secuestro de elementos de prueba.
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