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Los delincuentes dejaron en el colegio la ganzúa que utilizaron para forzar la ventana por la que ingresaron.
Los delincuentes no dan tregua en Garín y la realidad indica que las escuelas siguen siendo uno de sus objetivos preferidos. Al menos dos menores de edad ingresaron este miércoles 3 a la Escuela Primaria Nº30 del barrio La Loma, de donde sustrajeron computadoras y otros elementos.
Para entrar al establecimiento, ubicado en calle Buen Ayre y 18 de Julio -donde también funciona la secundaria Nº11- forzaron una reja y rompieron vidrios, en tanto que una vez adentro también dañaron los casilleros donde se guarda material didáctico y la puerta que utilizan los alumnos. La maldad a flor de piel.
En horas de la tarde del mismo día, la policía detuvo en el barrio a dos personas mayores de edad que andaban por la calle Falco con una de las CPU que habían sido robadas del establecimiento.
Pero ninguno de los dos había participado del robo. “Más tarde se tomó conocimiento de que quienes habían ingresado al lugar eran menores de edad, se los apresó, se procedió a comunicar al Juzgado Penal Juvenil y se están labrando las actuaciones con respecto al robo”, indicó a EL DIA de Escobar el comisario de Garín, David Alcaraz.
La historia oficial va estrechamente de la mano del relato de los vecinos, quienes contaron a este medio la parte oculta de la detención de los malvivientes. “Los grandes que agarraron son chorros conocidos del barrio, pero como ellos no fueron los que robaron la escuela y los habían mandado al frente, fueron hasta la casa de los pibes que robaron y se llevaron una computadora para devolverla al colegio. Justo cuando iban caminando por la calle con el CPU al hombro pasó el patrullero y los enganchó”, afirmó un vecino, rodeado de otros tantos que aprovecharon la ocasión para reclamar por la inseguridad imperante en La Loma y Baldi.
En este sentido, cabe destacar que hace tres semanas fue robada la sede de la ONG “Unidos en Progreso”, que funciona también en el barrio La Loma y a escasas cuadras de la escuela violentada.
Además, no fue esta la única que sufrió un hecho de estas características en la última semana. El lunes 1º también se registraron actos de vandalismo contra el edificio de la escuela Nº 24 del barrio San Javier. La maldad, a flor de piel.
Fotografía: Ricardo Pedersen
