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En política, muchas veces se habla de sellos de goma creados para facturar en épocas de elecciones. Algunos lo hacen de manera lícita, pero otros no tanto. Este parece ser el caso del escobarense Sergio Jesús Medrano, creador y apoderado del partido Justicia y Dignidad Patriótica, a quien la Cámara Nacional Electoral acaba de confirmarle un procesamiento sin prisión preventiva por simular candidaturas y quedarse con millones de pesos asignados por el Estado para la impresión de boletas. Por la misma maniobra hay otros tres imputados.
La resolución judicial, dictada el pasado jueves 4, sostiene que Medrano, junto a Ernesto Raúl Habra, Yamil Eloy Salerno y Matías Mauricio Burgos, integró una estructura destinada a presentar precandidatos inexistentes, fallecidos o que desconocían su inclusión en las listas de las PASO 2023, con el objetivo de acceder a fondos públicos destinados a la impresión de boletas y la actividad partidaria.
Según la investigación, las irregularidades en las listas de precandidatos se detectaron en cuatro partidos políticos: Encuentro Republicano Federal, Esperanza del Pueblo, Justicia y Dignidad Patriótica y Proyecto Joven. Las agrupaciones incluyeron en sus nóminas a 228 precandidaturas relevadas por la Justicia, de las cuales 170 no fueron ratificadas por los supuestos postulantes, quienes declararon no haber consentido su inclusión, mientras que solo 58 resultaron ratificadas, aunque varios testigos afirmaron no haber firmado documento alguno.
El tribunal destacó que la maniobra tenía un objetivo claro: obtener fondos públicos asignados para la impresión de boletas y la actividad partidaria sin intención real de competir en las elecciones. La Dirección Nacional Electoral le asignó al partido Proyecto Joven, un total de $352.050.020,32 en concepto de aportes de campaña e impresión de boletas, mientras que Justicia y Dignidad Patriótica recibió $124.224.124,30 por los mismos conceptos. Los partidos Esperanza del Pueblo y Encuentro Republicano Federal no lograron cobrar los montos asignados debido al rechazo de sus listas.
El fallo advierte que detrás de la operatoria existió un “negocio multimillonario” con una imprenta DWP S.R.L. vinculada a Ernesto Raúl Habra y a su esposa, que funcionó aprovechando vacíos de control en el sistema de financiamiento electoral. Habra negó haber gestionado listas para partidos distintos a Encuentro Republicano Federal y responsabilizó a Bonacci y Medrano por la maniobra. Además, pidió un peritaje caligráfico y sostuvo que su imprenta era la única capaz de imprimir los ocho cuerpos de boleta requeridos por la Justicia Electoral.
Por su parte, Sergio Jesús Medrano reconoció que, aunque era la persona visible ante el juzgado, “toda la gestión y administración del partido la había puesto en manos del señor Ernesto Habra”. Además, admitió haber recibido “algo más de 100 millones de pesos”, que según su versión fueron destinados a la impresión de boletas y folletos.
La Cámara Nacional Electoral confirmó las medidas cautelares sobre los bienes y cuentas de los imputados: $480 millones para Habra, $370 millones para Salerno, $140 millones para Medrano y $50 millones para Burgos. El tribunal sostuvo que los acusados habrían buscado financiar la impresión de boletas y la actividad partidaria sin una real vocación de competir, en beneficio propio.
La fiscalía respaldó al tribunal y destacó que la causa investiga “la confección y utilización de documentación falsa, para lograr la aprobación de precandidaturas para las elecciones primarias del año 2023 en la provincia de Buenos Aires” y acceder a fondos públicos destinados a boletas, “sin una real vocación de competir electoralmente, de modo tal que perseguían defraudar al Estado, en tanto dicha erogación no fuera destinada a tal fin sino utilizada en beneficio propio”.
Antecedentes políticos de Medrano
Sergio Jesús Medrano, vecino de Belén de Escobar y docente de Matemáticas, fundó en 2021 el partido Justicia y Dignidad Patriótica y encabezó su primera lista de precandidatos a diputados nacionales por la provincia de Buenos Aires. La fuerza obtuvo la personería jurídica el 16 de junio de ese año y presentó una boleta corta, sin candidatos locales de concejales.
Antes de esto, Medrano ya había intentado participar en política: en 2019 buscó competir en las internas de Consenso Federal con Roberto Lavagna, en 2017 quiso disputar una interna local con Justicia y Dignidad Peronista y en 2015 aspiró a ser precandidato a intendente, aunque la Junta Electoral provincial dio de baja su lista.
Su proyecto político se presentó como “totalmente nuevo y ajeno al arco político argentino”, integrado por “vecinos profesionales y comprometidos con el distrito”. Con propuestas que incluyen la defensa del medioambiente, la crítica a la corrupción y la oposición a la legalización del aborto y la “ideología de género”. Medrano destacó que “el solo hecho de participar, después de tantos años de lucha y militancia sin bajar los brazos, ya es un premio”.
En esos comicios, la lista que encabezó Medrano cosechó 302 votos a nivel local (0,25%) y 8.260 en toda la provincia (0,09%).
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