Con motivo del 16º aniversario del Ferroamigos Club Escobar, se llevó a cabo este sábado una muestra de ferromodelismo en el Museo del Tren, cuya sede funciona en el ex galpón de cargas de la estación de Belén de Escobar.
Durante toda la tarde se exhibieron maquinarias antiguas, trenes en miniatura, herramientas de vía y obra, cartelería de estaciones, numeradores de kilometraje de los postes de telégrafo, fotografías, ropa de los guardas e inspectores y boletos, entre otras cosas.
“La novedad de este año es que hemos restaurado un vehículo de vía del año 1909 que acoplamos a nuestra zorra de vía, de 1910. Lo único que teníamos eran unas maderas sueltas y un par de ruedas, de ahí, con los planos originales, armamos el vehículo”, comentó a El Día de Escobar Gerardo Villafañe, miembro de la comisión directiva.
La asociación cuenta con 30 socios inscriptos pero son entre 10 y 15 los que colaboran activamente. Se solventa con el aporte de los socios y con el bono contribución de $5 de quienes los visitan sábado tras sábado, a partir de las 16 horas, que es cuando habitualmente abre el museo.
La muestra de ferromodelismo es casi una excusa para que la gente de Escobar se acerque y conozca lo que hacen estos apasionados por los trenes. “Nuestra actividad, en esencia, es un museo: restauramos piezas, las salvamos de la depredación y la destrucción y nos dedicamos a mantenerlas y exhibirlas”, explica Villafañe.
Además, el grupo de Ferroamigos tiene como hobby armar trenes en miniatura. Algunos los compran para armar y otros los arman desde cero. Estos últimos, por lo general, son prototipos o copias de los que circularon o aún se ven circulando por las vías nacionales. Los que compran para armar son modelos norteamericanos y europeos.
La diferencia entre lo que pudo verse el sábado y lo que se ve en los días de funcionamiento normal del museo es la cantidad de trenes, ya que se mostraron más de 100 modelos diferentes mientras habitualmente no hay más de 10.
Ferroamigos comenzó hace 16 años, cuando un grupo de gente se juntaba en la estación a sacar fotografías y a hacer algún viaje en tren. “Cuando nos dimos cuenta de que éramos varios los que teníamos la misma inquietud, armamos una asociación. Y con el tiempo hicimos gestiones ante el Estado Nacional para tener este galpón, que fue lo primero que tuvimos que restaurar. Así, empezamos a sumar cosas y hoy tenemos esta muestra que cualquiera puede ver en Escobar”.
Fuente: El Día de Escobar