Pura fuerza. El deportista matheuense participó en tres pruebas y logró el segundo puesto en 100 metros espalda.
Participó de las pruebas de 200 metros combinados, 100 mariposa y 100 espalda, donde salió segundo. Tendrá una última chance en junio, cuando corra en el Open del CeNARD.
El nadador especial matheuense Amílcar Guerra compitió del viernes al domingo en el Abierto de Natación que se realizó en Río de Janeiro, donde obtuvo una medalla de plata pero no logró su objetivo de clasificar a los Juegos Paralímpicos que se disputarán allí este año.
El torneo Test Event era clasificatorio para los Juegos Paralímpicos de Brasil 2016, que se harán desde el 7 de septiembre, y Guerra representó a la Selección Argentina en el mismísimo natatorio donde se realizará la trascendental competencia.
En el primer día del Abierto corrió las semifinales de los 200 metros combinados, quedando en el 4º lugar, y los 100 mariposa, donde terminó 6º. Por la tarde fue el turno de las finales de ambas pruebas: salió 4º en los 200 combinados, con un tiempo de 2’32”18/100, y en la final de mariposa fue descalificado.
El sábado tuvo la prueba final de los 100 metros estilo espalda, donde el nadador de Independiente de Escobar mostró su mejor desempeño, quedando 2º con un registro de 1’08”18/100 y quedándose con la medalla de plata. Si bien en esta carrera ocupó un lugar de privilegio en el podio, los tiempos no le alcanzaron para lograr la clasificación a los Juegos Paralímpicos.
Pero no todo está perdido, ya que tendrá una última chance en junio, cuando corra en el CeNARD. “Es difícil, pero estoy cerca en las tres pruebas, en los 200 combinados me falta bajar 1,5 segundo para dar la marca. Hay que seguir entrenando”, afirmó a El Día de Escobar y El Deportivo Web.
Esas pruebas del Open de FADESIR en Capital Federal serán claves para saber qué pasará con su sueño olímpico, el mismo que el de todo deportista, amateur o profesional.
Chance. Amílcar Guerra se jugará a todo nada en junio, en el CeNARD, para llegar a Río.
Por Javier Rubinstein
Fuente: El Día de Escobar
