
Sergio Masanelli consiguió un meritorio tercer puesto.
Sergio Masanelli (14 años) logró un muy buen rendimiento en el torneo nacional de boccias que se disputó la semana pasada en la ciudad de Mar del Plata, en el CEF que se ubica debajo del Hotel Provincial, en el corazón de La Feliz. Fue organizado por el Círculo Deportivo de Lisiados (CIDELI).
Masanelli es un chico con discapacidad motriz que desde hace años forma parte del grupo de deportistas del área Especial del Municipio. En este torneo enfrentó a jugadores mayores que él y disputó seis partidos, en su grupo de siete competidores categoría BC4. Ganó cuatro partidos y perdió dos; había empatado el segundo puesto pero en el desempate por cantidad de tiros efectuados finalmente se quedó con el tercer escalón del podio y la medalla de bronce.
El joven, que vive en Ingeniero Maschwitz, tiene un promisorio futuro en este deporte adaptado y entrenó varias veces con la selección argentina, que podría integrar próximamente.
Junto a él también viajó Matías Benítez, que participó en otra categoría. Los profesores que acompañaron a los chicos fueron Alejandro Baldelomar, Romina Medina y Lorena Pereyra, junto a Nelson Parsons y Horacio Castro, del polideportivo Luis Monti, con el apoyo de la Comuna.
Los días 11, 12 y 13 de mayo se hará otro nacional de boccias, en la misma sede. La diferencia es que los participantes serán categoría Sub 21, por lo que Masanelli tendrá más chances de lograr otra medalla ante chicos de su edad.
Similar a las bochas
Las boccias es un juego adaptado, similar a las bochas tradicionales y únicamente participan personas en silla de ruedas, con afectaciones por parálisis cerebral y otras discapacidades físicas severas.
Es un juego de precisión y estrategia. Las categorías son en función del grado de discapacidad que padezcan los deportistas, que lanzan las bolas con sus manos o pies; los de discapacidad más severa juegan con la ayuda de una canaleta o rampa, sobre la que su auxiliar deposita la bola una vez escogida la dirección por el propio deportista.
Se juega con bolas rojas y azules, más una blanca. El competidor que deje la bola de color más cerca de la bola blanca anotará un punto; y así por cada una de las bolas que se encuentren más cerca de la blanca que la más próxima del contrario. Al finalizar los parciales, los puntos obtenidos en cada uno de ellos se sumarán, siendo ganador el que más puntos haya sumado.
Por Javier Rubinstein
Fuente: El Día de Escobar